Especialízate para gestionar alojamientos turísticos

El sector del turismo y la hostelería es dinámico, se transforma para adaptarse a las nuevas exigencias de los usuarios y para contribuir al desarrollo sostenible del territorio. En este contexto, los directivos/as de alojamientos turísticos se encargan de organizar, gestionar, coordinar y controlar los departamentos del establecimiento, y para ello, se requieren una serie de competencias.
 
¿Cuáles son estas competencias básicas? Antonio Fernández Casado, autor del libro “Manual práctico de dirección de hoteles, marketing y ventas online del siglo XXI”, afirma que la hotelería española necesita un nuevo perfil de director de hotel completamente diferente a lo que ha venido siendo hasta ahora. Este nuevo perfil debe ser competente en la fidelización del cliente, como vía para incrementar la venta directa. Para lograrlo, hay que saber escuchar, atender y superar las expectativas del cliente.
 
Así pues, las competencias para un buen gestor de alojamientos turísticos son:

- Orientación al cliente. Aunque parezca una obviedad, el cliente es activo y quiere sentirse protagonista. El objetivo de un buen director hotelero es que el cliente se sienta parte del establecimiento, que empatice con la marca, que participe y recomiende… los expertos señalan que lo ideal es crear un vínculo que permanezca más allá del momento del consumo.

- Dominio de idiomas. Para Teresa Gozalo, CEO de Les Roches Marbella, se trata de una variable de tal peso específico dentro de la industria de hotelería y turismo que podemos asegurar que va más allá de ser una mera competencia genérica o transversal, estableciéndose como una competencia técnica directamente relacionada con el perfil profesional para el que prepara una titulación. El conocimiento de inglés es inexcusable, pero cobran fuerza idiomas como el alemán, chino o ruso.

- Capacidad para gestionar el personal. El director o gestor debe fijar los objetivos y tareas de sus subalternos, evaluar su desempeño y aplicar las políticas de recursos humanos. Pero también, debe motivar, escuchar y generar confianza a su personal. Una de las claves para lograrlo es ser un ejemplo de perseverancia, honestidad y colaboración.

- Flexibilidad y movilidad. El mercado globalizado traspasa los límites geográficos, especialmente en el sector turístico. Un buen gestor debe tener una visión internacional, disponibilidad para viajar y conocer otros lugares y culturas. Teresa Gozalo, afirma que un director hotelero debe adecuarse e integrarse en entornos muy distintos con unos acreditados niveles de productividad desde un primer momento.