¿Qué es un Neurólogo?
Un neurólogo o neuróloga es un médico especializado en la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de las enfermedades y patologías del sistema nervioso. Atienden trastornos de salud que afectan el cerebro, la médula espinal, los nervios periféricos y el sistema muscular, como pueden ser Parkinson, epilepsia, esclerosis múltiple o neuropatías, entre otros.
Estos profesionales proporcionan una atención personalizada a los pacientes y se encargan de realizar diagnósticos exhaustivos, teniendo en cuenta la sintomatología, los antecedentes familiares y el historial clínico. Si es necesario, llevan a cabo o solicitan la realización de diferentes pruebas y exploraciones para identificar y comprender las afectaciones neurológicas de sus pacientes.
Posteriormente, teniendo en cuenta los resultados obtenidos, realizan un plan de tratamiento y un seguimiento al paciente, o bien derivan el caso si se requiere la intervención de otros especialistas.
Los neurólogos y las neurólogas pueden ejercer su labor profesional en una subespecialidad de la disciplina, como puede ser neuropediatría o neurosonología. Suelen formar parte o dirigir equipos multidisciplinares con otros profesionales sanitarios como neurocirujanos, neurofisiólogos, psiquiatras, psicólogos clínicos o fisioterapeutas.
La neurología es una profesión regulada y para ejercerla es necesario cursar, en primer lugar, el Grado en Medicina. Finalizados estos estudios, se deberá optar por la especialidad de neurología y realizar la formación MIR (Médico Interno Residente).
Funciones de un Neurólogo
Algunas de las funciones que desempeña un neurólogo o una neuróloga son:
- Realizar evaluaciones iniciales de pacientes e investigar la existencia de enfermedades previas.
- Realizar pruebas exploratorias para evaluar la fuerza muscular, la sensibilidad o los reflejos, con el fin de verificar el correcto funcionamiento del sistema nervioso.
- Identificar las pruebas diagnósticas necesarias en cada caso, teniendo en cuenta la sintomatología, historial del paciente y recursos disponibles.
- Analizar e interpretar los resultados de técnicas y pruebas clínicas como electroencefalogramas, electromiografías o TAC craneales.
- Recetar y supervisar el tratamiento farmacológico recomendado y ajustar la medicación o dosis según las circunstancias del paciente y su estado.
- Establecer relaciones empáticas con los pacientes, ofreciendo atención personalizada y manteniendo una comunicación asertiva.
- Liderar o colaborar en espacios conjuntos con los diferentes médicos especialistas y profesionales de la salud, para proporcionar una atención global al paciente.
- Coordinar cuidados integrales durante el tratamiento cuando intervengan varios especialistas.
- Proporcionar seguimiento a los pacientes para garantizar la recuperación óptima.
- Derivar a pacientes a diferentes profesionales especializados del sistema sanitario, como podrían ser psiquiatras, neurocirujanos, endocrinólogos o fisioterapeutas, entre otros.
- Participar en investigaciones clínicas que requieran la aportación y enfoque de un neurólogo.
- Contribuir al desarrollo de programas educativos y de divulgación científica sobre patologías del sistema nervioso, informando a la ciudadanía sobre medidas preventivas y cuidados neurológicos.
Perfil profesional de un Neurólogo
Intereses
Las personas que ejercen la neurología suelen tener los siguientes intereses:
- Contribuir a la promoción de la salud.
- Coordinar equipos médicos.
- Tratar de forma efectiva con los pacientes.
- Colaborar con otros profesionales sanitarios.
- Diagnosticar y tratar patologías del sistema nervioso.
Competencias
Un neurólogo debe contar con diferentes habilidades, conocimientos y capacidades técnicas:
- Conocimiento detallado sobre la anatomía y fisiología del sistema nervioso central y periférico.
- Interpretación de diferentes pruebas y técnicas diagnósticas propias de la especialidad.
- Capacidades de investigación clínica.
- Conocimiento amplio sobre patologías y trastornos neurológicos y su protocolo médico especifico.
- Gestión de urgencias neurológicas con necesidad de reacción rápida.
- Gestión de equipos de trabajo.
- Capacidad de trabajo en equipos interdisciplinares con otros profesionales del sector sanitario.
- Conocimiento actualizado de tecnologías usadas en el diagnóstico y tratamiento de patologías neurológicas, como pueden ser técnicas de neuroimagen o la estimulación magnética tanscraneal.
Además, es conveniente poseer las siguientes competencias transversales:
- Análisis y resolución de problemas.
- Toma de decisiones.
- Aprendizaje permanente.
- Escucha activa.
- Inteligencia emocional.
- Trabajo en equipo.
Rasgos de personalidad
Por otro lado, los aspectos de personalidad que caracterizan a estos profesionales son:
- Responsabilidad.
- Meticulosidad
- Compromiso.
- Constancia.
- Empatía.
- Motivación.
- Prudencia.