Especialista en comportamiento animal

Los especialistas en comportamiento animal tratan problemas relacionados con el comportamiento de los animales domésticos, como gatos, perros, aves y caballos. Analizan las características de la mascota e investigan la historia del animal con su amo, y luego examinan la mascota para evaluar el problema. A continuación, dan consejos y ayudan al amo a establecer tratamiento.

Los especialistas en comportamiento animal ayudan a los amos a hacer frente a una serie de problemas en el comportamiento de sus mascotas. Estos incluyen:

• La agresión (hacia personas u otros animales).
• Hacer sus necesidades en lugares inapropiados.
• Ansiedad.
• Dañar los muebles.
• Un comportamiento vocal inapropiado, por ejemplo, ladrar mucho.
• Las fobias.

Los veterinarios remiten los especialistas en comportamiento animal.
En ocasiones, un problema médico puede causar un problema de comportamiento. Los veterinarios y los especialistas en comportamiento animal pueden trabajar en coordinación para resolver los problemas cuando es necesario.

Los especialistas en comportamiento animal pueden trabajar en clínicas regionales, por ejemplo, en consultorios veterinarios o en perreras. También visitan los amos en sus propios hogares.

Todos los profesionales trabajan de manera diferente, pero las visitas duran entre 90 minutos y 2 horas. Si es posible, todos los miembros de la familia deben estar presentes en la reunión, para comprender mejor el problema y ayudar a establecer el plan de tratamiento.

En primer lugar, el especialista escucha y habla con el dueño para conocer la historia del problema, es decir, cuál es el problema y cuánto tiempo hace que dura. A continuación, evalúa el comportamiento de la mascota y establece formas de controlarlo o modificarlo.

El especialista debe explicar al amo las posibles causas del comportamiento inapropiado de la mascota y discutir cómo se puede cambiar dicho comportamiento, y ofrece asesoramiento y sugerencias al amo sobre los métodos para minimizar el problema.

A continuación, el especialista en comportamiento animal asesorar al propietario con un plan de tratamiento a largo plazo para controlar o resolver el problema.

A veces, el comportamiento del animal puede mejorar muy rápidamente. Más a menudo, sin embargo, el proceso requiere más tiempo. El especialista obtendrá un enfoque completo y sistemático de la evolución del comportamiento, y puede decidir cambiar sus consejos y el plan de tratamiento dependiendo dicha evolución.

El especialista debe mantenerse en contacto con el amo, por ejemplo, por teléfono. Pueden aconsejarle dependiendo de la respuesta del animal al tratamiento. Si es necesario, el especialista en comportamiento animal y el amo pueden establecer una cita de seguimiento.

El especialista en comportamiento animal redacta informes que describen el caso y la terapia aplicada, y envía una copia del informe al amo y el veterinario que le derivó el caso.

La mayoría de los especialistas son trabajadores autónomos. Tienen que llevar su propia contabilidad y sus registros financieros. Conducen por el área local para visitar a los dueños de mascotas, ya sea en clínicas o en los propios hogares de los dueños

Un especialista en comportamiento animal necesitará:

• Entender sobre el comportamiento de las mascotas.
• Interés por la biología.
• Habilidades prácticas para manejar los animales.
• Capacidad de mantener la calma cuando se trata con animales difíciles.
• Habilidades de comunicación para construir relaciones de confianza con los amos de los animales domésticos, y para trabajar en coordinación con los veterinarios.
• Tacto, simpatía y paciencia. La evolución del animal puede ser lenta y el trabajo puede resultar frustrante.
• Automotivación y capacidad para animar al amo a seguir adelante con el plan de tratamiento.

Los especialistas en comportamiento animal a menudo son trabajadores autónomos, en cuyo caso necesitan tener las habilidades necesarias para manejar su propio negocio, por ejemplo, para llevar al día cuentas y registros. Tendrán que estar bien organizados y mostrar buenas habilidades de gestión del tiempo.

Probablemente tendrá que desplazarse por todo el área local para acudir a la citas con los amos, por lo que casi siempre se requiere un permiso de conducir.

• Aptitudes para llevar registros.
• Asesora sobre cómo tratar con comportamientos fóbicos.
• Capacidades organizativas.
• Capaz de mantener la calma al tratar con animales difíciles.
• Dirige un consultorio.
• Dispuesto a realizar cambios para mejorar resultados.
• Emprende y lleva su propio negocio.
• Establece y mantiene buenas relaciones con clientes y usuarios.
• Habilidad para el marketing.
• Habilidad para evaluar.
• Habilidades comunicativas.
• Interés por la biología y psicología animal.
• Lleva registros con precisión.
• Modifica el comportamiento de animales agresivos.
• Motiva a las personas.
• Observador.
• Persuasivo.
• Pone en práctica conocimientos y teoría en materia de psicología.
• Presta asesoramiento sobre varios tipos de problemas, como marcar territorio con la orina o dañar muebles.
• Recibe referencias de veterinarios.
• Redacta informes de consulta a veterinarios.
• Redacta planes de modificación del comportamiento para los propietarios.
• Sensible.
• Trata casos de nerviosismo y ansiedad.

A continuación se relacionan algunos de los estudios que permiten ejercer esta profesión. Hay que tener en cuenta que, dependiendo del ámbito de especialización, es posible que se tenga que complementar la formación con otros cursos más específicos del sector. La formación continua es un aspecto clave para la mejora profesional.

• Grado en Veterinaria