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¿Qué es un Administrativo de la Administración Pública?
Los administrativos de la Administración Pública trabajan en organismos y departamentos gubernamentales. Son responsables de tareas administrativas como ocuparse de consultas del público, encargarse de las solicitudes de subsidios, dar consejo, gestionar la correspondencia y escribir cartas. A menudo, supervisan equipos de personal.
Funciones de un Administrativo de la Administración Pública
La Administración Pública está formada por un gran número de organismos y departamentos gubernamentales.
Los ministerios formulan política, como por ejemplo:
También pueden supervisar a un equipo reducido de ayudantes. Algunos administrativos planifican trabajo, delegan tareas y valoran las necesidades de formación.
En algunos departamentos, los administrativos aconsejan al público, de forma presencial o por teléfono. Incluso pueden entrevistar a personas para valorar, por ejemplo, sus necesidades y decidir el tipo de ayuda que pueden recibir.
La denominación del puesto varía ámpliamente en función del departamento y de la función.
Los ministerios formulan política, como por ejemplo:
- el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte,
- el Ministerio de Empleo y Seguridad Social,
- el Ministerio de Fomento.
- la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición,
- la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo,
- el Consejo de Seguridad Nuclear.
- supervisión de un equipo de personal,
- trato con clientes,
- toma de decisiones,
- coordinación de reuniones,
- supervisión de presupuestos,
- producción de información gerencial y planificación de informes,
- organización de formación,
- uso de ordenadores.
También pueden supervisar a un equipo reducido de ayudantes. Algunos administrativos planifican trabajo, delegan tareas y valoran las necesidades de formación.
En algunos departamentos, los administrativos aconsejan al público, de forma presencial o por teléfono. Incluso pueden entrevistar a personas para valorar, por ejemplo, sus necesidades y decidir el tipo de ayuda que pueden recibir.
La denominación del puesto varía ámpliamente en función del departamento y de la función.
Perfil profesional de un Administrativo de la Administración Pública
Un administrativo de la Administración Pública, deberá tener las características siguientes:
- Tener buenas habilidades organizativas.
- Ser capaz de planificar y administrar cargas de trabajo y recursos.
- Ser un jugador de equipo eficaz.
- Tener ojo crítico y la habilidad de analizar información.
- Tener buenas habilidades orales y escritas.
- Poseer buenas habilidades interpersonales para tratar de cara al público.
- Ser capaz de tomar decisiones y resolver problemas.
- Ser adaptable y sensible a los cambios.
- Tener una actitud profesional y accesible.
- Ser consciente y respetar la confidencialidad.
- Buenas capacidades en TI para, por ejemplo, gestionar, actualizar y extraer información de una hoja de cálculo o base de datos.
Competencias y habilidades de un Administrativo de la Administración Pública
- Accesible.
- Analiza información.
- Aptitud para tomar decisiones.
- Aptitudes para la comunicación verbal y escrita.
- Aptitudes para la planificación.
- Asesora al público.
- Capacidad de análisis.
- Capacidad para priorizar tareas.
- Capacidad para trabajar en equipo.
- Capacidades organizativas.
- Capaz de adaptarse a los cambios.
- Capaz de dirigir a personas y recursos.
- Capaz de llevar varios casos.
- Capaz de mantener información confidencial.
- Concierta citas.
- Delega tareas.
- Destrezas en informática.
- Dirige y supervisa al personal.
- Entrevista a personas.
- Flexible.
- Gestiona la formación del personal.
- Habilidad para la negociación.
- Habilidad para resolver problemas.
- Habilidades interpersonales.
- Planifica cómo debe llevarse a cabo el trabajo.
- Profesional.
- Reúne informes y datos estadísticos.
- Toma decisiones.
- Trabaja bajo un presupuesto fijo.
Estudios para ser Administrativo de la Administración Pública
A continuación se relacionan algunos de los estudios que permiten ejercer esta profesión. Hay que tener en cuenta que, dependiendo del ámbito de especialización, es posible que se tenga que complementar la formación con otros
cursos
más específicos del sector. La formación continua es un aspecto clave para la mejora profesional.