Población o clientes potenciales
En nuestro país se han publicado varios estudios sobre los aspectos cuantitativos de la población con discapacidad, desprendiéndose del más reciente cifras que representan el 9% de la población general (INE, 2000).
Según la Encuesta sobre Discapacidades, Deficiencias y Estados de Salud, realizada en 1999 por el Instituto Nacional de Estadística, el número de personas con diferentes tipos de discapacidad en España es de 3.528.221. De ellas, 519.495 tienen edades comprendidas entre los 16 y 44 años, representando el 15% del colectivo.
Ésta y otras fuentes consultadas apuntan los mismos resultados: altos porcentajes de personas con discapacidad en el tramo de edad joven-adulta.
En consecuencia, teniendo en cuenta que existe mucha población con discapacidad en este tramo de edad y que una de las opciones en la vida de cualquier joven puede ser continuar sus estudios en la universidad, creemos importante centrar el presente proyecto en los estudiantes universitarios con discapacidad, así como en los que van a acceder a estos estudios.
La discapacidad a veces genera necesidades y demandas diferentes de las que tiene el resto de la población. Determinadas limitaciones, dependiendo siempre del tipo de discapacidad, hacen que estas personas tengan perfiles y demandas sociales diferentes. No hay dos personas iguales ni dos discapacidades iguales, por lo que no habrá dos personas con discapacidad que necesiten lo mismo. Ésta es la razón por la cual es necesario un asesoramiento individualizado.
Pero, ¿qué características tiene la población de estudiantes con discapacidad?
Universitarios con discapacidad
Cada vez acceden a las universidades españolas mayor número de alumnos con discapacidad. Los servicios, programas o unidades de apoyo de las universidades informan sobre este incremento y sobre la aparición de nuevas necesidades. Es más, a partir de la reciente implantación de la gratuidad de tasas académicas, se espera un incremento aún mayor en número, con la consecuente necesidad creada de asesoramiento. Por otra parte, está aumentando la incidencia de estudiantes con problemas de aprendizaje, enfermedades crónicas, así como los que tienen problemas de salud mental, presentando necesidades distintas a las de estudiantes con discapacidad sensorial o movilidad reducida, teniendo que hacer más hincapié, si cabe, en la confidencialidad.
Sus necesidades y demandas
Normalmente, los alumnos con discapacidad que llegan hasta la universidad, traen consigo una experiencia de apoyos y adaptaciones curriculares que les han hecho posible acceder a estudios superiores, y que han tenido como objetivo ofrecer esa igualdad de oportunidades que ya se pedía desde la Ley de Integración Social del Minusválido (LISMI, 1982), y que se recoge en la Ley de Igualdad de Oportunidades, No Discriminación y Accesibilidad Universal (Ley 51/2003, de 2 de diciembre). Nos encontramos con estudiantes de Secundaria y Bachiller que tienen en mente realizar estudios superiores y no conocen los recursos existentes, universitarios que necesitan saber dónde acudir, familias que desconocen los recursos a los que pueden acceder sus hijos, etc., en definitiva, personas a las que dar respuestas y recursos. Tecnologías de la Información y la Comunicación, y estudiantes con discapacidad
Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (en adelante TIC’s) ayudan a satisfacer las necesidades de las personas con discapacidad, mejorando su comunicación interpersonal e integración. Permiten transmitir y recibir mensajes, adaptándose a las diferentes circunstancias de emisores y receptores, mejorando la calidad de vida de las personas con discapacidad.
Ordenadores y acceso a Internet
Dentro de las posibilidades que ofrecen las TIC’s a las personas con discapacidad, los ordenadores y el acceso a Internet son las más utilizadas. Si para cualquier persona y en cualquier momento las TIC’s pueden ser útiles, aún lo son más si nos centramos en el ámbito de la educación.
Dada la importancia que los ordenadores tienen tanto en el proceso de aprendizaje y acceso a la información, como en su función de instrumento de comunicación, es importante saber qué adaptaciones necesitan los estudiantes con discapacidad para acceder a la información con las mismas oportunidades que el resto de los estudiantes. Según el tipo y grado de discapacidad, sus necesidades van a ser diferentes, como diferentes serán las adaptaciones a realizar. Así:
•Los estudiantes con discapacidad visual se pueden beneficiar de diferentes adaptaciones dependiendo del grado de pérdida de visión: pantallas grandes, ampliación de iconos y caracteres, cambio de colores, lectores de pantalla, reconocimiento de voz, línea braille, escáner, etc.
•Los estudiantes con discapacidad auditiva necesitan menos adaptaciones, aunque los productos multimedia tienen que transcribirse a texto o complementarse con imágenes de vídeo.
•Los estudiantes con dificultades de aprendizaje (disgrafía, dislexia, discalculia, dispraxia) pueden utilizar sistemas de lectura, predictores de palabras, reconocimiento de voz, calculadoras habladas, calendarios, etc., así como opciones de los procesadores de texto: deletreo, corrector gramatical, colores, subrayado, etc.
•Los estudiantes con problemas de movilidad, representan un grupo muy heterogéneo. Antes de poder usar un ordenador tienen que llegar a él con total acceso al lugar en el cuál esté situado, así como a los periféricos. Pueden utilizar sistemas alternativos de teclado, predictor de palabras, reconocimiento de voz, escanear materiales, software específico, etc.
Ésta es la razón por la cuál el acceso al Plan ADU es vía Internet, aunque también de manera telefónica, para no excluir a las personas que no sean usuarios de la Red.
Accesibilidad en Internet
Las personas con diversidad funcional se encuentran frecuentemente con dificultades al consultar la información disponible en Internet. Existen numerosas opciones para solucionar los problemas de acceso como son: teclados adaptados, emuladores de ratón, líneas braille, sintetizadores de voz, múltiple software, etc., pero el diseño de las páginas Web puede ser en sí mismo un obstáculo. Por todo ello, hemos diseñado una página Web accesible a todo tipo de personas con discapacidad y al software que utilizan, siguiendo las recomendaciones internacionales.
El Plan ADU desarrolla dos líneas básicas de actuación, una dirigida hacia el asesoramiento, como ya se ha mencionado anteriormente, y otra de investigación. Se pueden realizar las consultas telefónicamente, a través del correo electrónico o de manera presencial.
A través de nuestra página Web http://www.usal.es/adu ofrecemos información y asesoramiento sobre el acceso o estancia en las universidades españolas, sobre los Servicios, Programas o Unidades a las cuales dirigirse, además de disponer de otra información como normativa vigente, bibliografía específica, reuniones, cursos y congresos, fuentes documentales, noticias de actualidad, enlaces de interés, etc.
El Plan ADU cuenta con un equipo de trabajo con un marcado carácter interdisciplinar, formado por profesionales de ramas tan diversas como la psicología, educación, psicopedagogía, documentación, accesibilidad y discapacidad.
Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, así como la documentación relativa a la discapacidad, son materiales imprescindibles para el trabajo diario del Plan ADU.