Esta es la segunda ocasión en la que el Gobierno retrasa la implantación de la nueva Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU). En el verano de 2022 el MEFP anunció que la nueva prueba quedaría establecida totalmente en el curso 2026-2027, pero a finales del año pasado decidió aplazar su implantación total hasta 2028, e informó que los cambios se realizarían progresivamente desde el curso 2023-2024.
Recientemente, el MEFP y el Ministerio de Universidades han comunicado a las comunidades autónomas que finalmente no se establecerán los cambios que contemplaba la nueva EBAU para este curso.
El ejecutivo en funciones ha tomado la decisión de aplazar la implantación progresiva de la nueva selectividad, porque la aprobación de la norma excedería las competencias de un Gobierno en funciones, "generando confrontación con las administraciones autonómicas", justifica el MEFP en un comunicado.
Por su parte, el secretario de Estado de Educación, José Manuel Bar, y el secretario general de Universidades, José Manuel Pingarrón, también han trasladado esta decisión al presidente y la secretaria general de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), atendiendo a "la petición de un año de moratoria por parte de las instancias universitarias y rebajando la incertidumbre de docentes, alumnos y familias", concluyen en el comunicado.
Los cambios que contempla la nueva prueba de acceso a la universidad se dieron a conocer, por el MEFP, el pasado mes de febrero mediante el borrador del Real Decreto por el que se regulan las características básicas de la prueba de acceso a la universidad. Dichos cambios se retrasarán hasta la aprobación de la mencionada norma por parte del nuevo Ejecutivo.
Entre las modificaciones planteadas para la selectividad de 2023-2024 se encontraban aumentar de 90 a 105 minutos el tiempo de cada prueba, y de 30 a 45 minutos los descansos entre ellas; o elegir examinarse entre Historia de España o Historia de la Filosofía, en lugar de evaluarse solo de la primera asignatura mencionada, entre otros cambios.
Universidades y sindicatos valoran positivamente el aplazamiento
Tanto las universidades como algunos sindicatos han valorado positivamente que se retrase la reforma de la nueva EBAU, ya que habían propuesto previamente al Gobierno su aplazamiento al considerar que era muy apresurado implantarla en este curso 2023-2024.
Por ejemplo, CRUE universidades, asociación formada por 76 instituciones universitarias, ha indicado a través de un comunicado que "no existía tiempo suficiente para poner en marcha un nuevo modelo de acceso que podría perjudicar gravemente al estudiantado que en este curso 2023-2024 comienza el último curso de Bachillerato".
"Valoramos positivamente la decisión del Gobierno en funciones de mantener el formato actual de la EBAU y consideramos importante el anuncio de esta decisión en este momento en el que el estudiantado de Bachillerato está a punto de iniciar el curso y tiene que conocer las reglas del juego", ha señalado la presidenta de CRUE, Eva Alcón, a través de la web de la entidad.
Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha indicado en un comunicado que ve con buenos ojos el retraso de la nueva selectividad, teniendo en cuenta que si no se hubiera hecho, "el alumnado de 2º de Bachillerato comenzaría el curso sin conocer los criterios de la prueba a la que deberán enfrentarse en junio de 2024".
Para el sindicato, la decisión de aplazar la nueva selectividad "refleja la inestabilidad del sistema educativo. En este sentido, esperamos que la futura reforma se realice de manera pausada y consensuada en el nuevo ciclo político, con el fin de que haya una EBAU única en toda España sin diferencias en exigencia y nota".
En el apartado de Orientación de Educaweb puedes conocer en profundidad qué es, en qué consiste y cómo se estructura la actual prueba de selectividad.
Además, en este vídeo te explicamos más sobre ella.