Elías Manuel Amor Bravo es presidente de la Asociación Española para el Fomento de las Políticas Activas de Empleo y las Cualificaciones, AFEMCUAL. Es Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universitat de València y Máster en Gestión Pública Directiva por el Instituto Nacional de Administración Pública.
Ha sido director general de Formación y Cualificación Profesional de la Generalitat Valenciana desde 1998 a 2005; así como colaborador del Instituto Nacional de Cualificaciones Profesionales y de la OAPEE, Agencia Leonardo de España y de la Unión Europea. También ha sido profesor universitario y de posgrado en la Universitat de València, en ESIC Business School Valencia y la Universidad Carlos III de Madrid.
¿Qué grado de conocimiento tiene la ciudadanía sobre los Certificados de Profesionalidad y sus ventajas?
Por desgracia los Certificados de Profesionalidad no presentan una elevada notoriedad. No la que les corresponde o merecen. Incluso, existe no poca confusión en algunos casos, y esto se observa, por ejemplo, en aquellos procesos de orientación laboral en que se recomienda realizar un certificado y el candidato suele mostrar algún tipo de rechazo.
La gente los ha ido conociendo y aprobando conforme participan en los programas. No cabe duda de que se debería haber dado mucho más apoyo y difusión a los Certificados de Profesionalidad, tal como se hizo con los ciclos formativos de la FP inicial.
Los Certificados de Profesionalidad se incluían en la formación para el empleo antes de la nueva Ley de FP, y ahora están integrados en un único sistema junto con la formación profesional del sistema educativo ¿Qué implicaciones tiene este cambio y en qué beneficia a las personas?
Realmente, los Certificados de Profesionalidad llevan en la administración laboral muchos años. Tuvieron su regulación dentro de la Ley 5/2002 y ahora han entrado a formar parte del sistema integrado de la nueva Ley de FP. No creo que pierdan con ello. Por el contrario, conforme vayan siendo conocidos y aplicados tendrán un futuro mucho mejor que en el pasado.
¿Qué aportan los Certificados de Profesionalidad a las personas que deciden cursar esta formación?
Los Certificados se dirigen a la población activa. Es un mercado de grandes dimensiones que se beneficia de la experiencia, la práctica real y el reconocimiento de cualificación que aportan los Certificados, para después proseguir el aprendizaje y la carrera profesional.
¿Y qué beneficios proporcionan los Certificados de Profesionalidad al tejido productivo?
Las empresas que apuestan por los certificados saben que, gracias a ello, pueden contar con profesionales cualificados y especializados para los puestos ofertados en tiempo récord, y con una adaptación precisa a los requerimientos de los empleos.
Los beneficios para las personas son numerosos y cabe citar, entre otros:
¿Qué perfiles profesionales se interesan más por esta formación y por qué?
Todos. Va por etapas, en función de las demandas del mercado laboral y del ciclo económico.
¿Cuáles considera que son los perfiles que más se podrían beneficiar de los cursos destinados a obtener un Certificado de Profesionalidad?
Todos los perfiles se pueden beneficiar. Los Certificados de Profesionalidad representan un nivel de acceso rápido a la formación, la cualificación y la práctica profesional. Y deben ser entendidos desde esta perspectiva.
En el caso concreto de los ninis se ha visto que los Certificados pueden ayudarlos a incorporarse a un plan de formación a lo largo de la vida, sin los niveles de compromiso de la FP del sistema educativo. Incluso, hay programas que apostaron por los Certificados de Profesionalidad desde su nacimiento, como Escuelas taller, que dieron una atención especializada exitosa a estos colectivos de jóvenes.
Considero que las administraciones tienen que darles una mayor difusión y marketing a los certificados de profesionalidad.
¿Qué acciones se deberían realizar para que más personas se formen para obtener Certificados de Profesionalidad y así mejorar su empleabilidad?
Hay que mejorar la información y el conocimiento que se tiene de los Certificados de Profesionalidad, y aquí las administraciones deben jugar un papel fundamental. Los ejes de la comunicación de los Certificados deberían ser: inserción laboral, formación de calidad, cualificación inicial para continuar un plan a lo largo de la vida y adaptación al empleo requerido o buscado.
Desde los poderes públicos, se deben realizar acciones de notoriedad dirigidas a los trabajadores y empresas, o fomentar la difusión de buenas prácticas.
Además, en el ámbito de la orientación profesional hay mucho que hacer y de forma ordenada para aumentar el atractivo de los Certificados de Profesionalidad, sobre todo en las pruebas de evaluación de reconocimiento de la competencia. Los Certificados de Profesionalidad deben ser contemplados en una perspectiva de enfoque de aprendizaje a lo largo de la vida.
Ha sido director general de Formación y Cualificación Profesional de la Generalitat Valenciana desde 1998 a 2005; así como colaborador del Instituto Nacional de Cualificaciones Profesionales y de la OAPEE, Agencia Leonardo de España y de la Unión Europea. También ha sido profesor universitario y de posgrado en la Universitat de València, en ESIC Business School Valencia y la Universidad Carlos III de Madrid.
¿Qué grado de conocimiento tiene la ciudadanía sobre los Certificados de Profesionalidad y sus ventajas?
Por desgracia los Certificados de Profesionalidad no presentan una elevada notoriedad. No la que les corresponde o merecen. Incluso, existe no poca confusión en algunos casos, y esto se observa, por ejemplo, en aquellos procesos de orientación laboral en que se recomienda realizar un certificado y el candidato suele mostrar algún tipo de rechazo.
La gente los ha ido conociendo y aprobando conforme participan en los programas. No cabe duda de que se debería haber dado mucho más apoyo y difusión a los Certificados de Profesionalidad, tal como se hizo con los ciclos formativos de la FP inicial.
Los Certificados de Profesionalidad se incluían en la formación para el empleo antes de la nueva Ley de FP, y ahora están integrados en un único sistema junto con la formación profesional del sistema educativo ¿Qué implicaciones tiene este cambio y en qué beneficia a las personas?
Realmente, los Certificados de Profesionalidad llevan en la administración laboral muchos años. Tuvieron su regulación dentro de la Ley 5/2002 y ahora han entrado a formar parte del sistema integrado de la nueva Ley de FP. No creo que pierdan con ello. Por el contrario, conforme vayan siendo conocidos y aplicados tendrán un futuro mucho mejor que en el pasado.
¿Qué aportan los Certificados de Profesionalidad a las personas que deciden cursar esta formación?
Los Certificados se dirigen a la población activa. Es un mercado de grandes dimensiones que se beneficia de la experiencia, la práctica real y el reconocimiento de cualificación que aportan los Certificados, para después proseguir el aprendizaje y la carrera profesional.
¿Y qué beneficios proporcionan los Certificados de Profesionalidad al tejido productivo?
Las empresas que apuestan por los certificados saben que, gracias a ello, pueden contar con profesionales cualificados y especializados para los puestos ofertados en tiempo récord, y con una adaptación precisa a los requerimientos de los empleos.
Los beneficios para las personas son numerosos y cabe citar, entre otros:
- Obtener una acreditación para el desempeño profesional en un breve período de tiempo.
- Conseguir un reconocimiento de competencias a partir de pruebas de reconocimiento y evaluación.
- Obtener una acreditación para desarrollar un proceso de aprendizaje a lo largo de la vida.
- Lograr un empleo en los procesos de formación con compromiso de inserción.
- Facilitar una rápida recualificación profesional en los procesos de ajuste sectoriales.
"Los Certificados de Profesionalidad representan un nivel de acceso rápido a la formación, la cualificación y la práctica profesional".
¿Qué perfiles profesionales se interesan más por esta formación y por qué?
Todos. Va por etapas, en función de las demandas del mercado laboral y del ciclo económico.
¿Cuáles considera que son los perfiles que más se podrían beneficiar de los cursos destinados a obtener un Certificado de Profesionalidad?
Todos los perfiles se pueden beneficiar. Los Certificados de Profesionalidad representan un nivel de acceso rápido a la formación, la cualificación y la práctica profesional. Y deben ser entendidos desde esta perspectiva.
En el caso concreto de los ninis se ha visto que los Certificados pueden ayudarlos a incorporarse a un plan de formación a lo largo de la vida, sin los niveles de compromiso de la FP del sistema educativo. Incluso, hay programas que apostaron por los Certificados de Profesionalidad desde su nacimiento, como Escuelas taller, que dieron una atención especializada exitosa a estos colectivos de jóvenes.
Considero que las administraciones tienen que darles una mayor difusión y marketing a los certificados de profesionalidad.
¿Qué acciones se deberían realizar para que más personas se formen para obtener Certificados de Profesionalidad y así mejorar su empleabilidad?
Hay que mejorar la información y el conocimiento que se tiene de los Certificados de Profesionalidad, y aquí las administraciones deben jugar un papel fundamental. Los ejes de la comunicación de los Certificados deberían ser: inserción laboral, formación de calidad, cualificación inicial para continuar un plan a lo largo de la vida y adaptación al empleo requerido o buscado.
Desde los poderes públicos, se deben realizar acciones de notoriedad dirigidas a los trabajadores y empresas, o fomentar la difusión de buenas prácticas.
Además, en el ámbito de la orientación profesional hay mucho que hacer y de forma ordenada para aumentar el atractivo de los Certificados de Profesionalidad, sobre todo en las pruebas de evaluación de reconocimiento de la competencia. Los Certificados de Profesionalidad deben ser contemplados en una perspectiva de enfoque de aprendizaje a lo largo de la vida.
