Los nuevos tiempos requieren reinventarse, y tener nuevas competencias y capacidad de adaptación al cambio. Para las personas mayores de 50 años también es posible, aunque más complejo.
Reinventarse profesionalmente, una necesidad
Reinventarse es poner en marcha acciones para generar cambios personales de alto impacto. Con respecto a lo profesional estas acciones deben encaminarse para iniciar una nueva trayectoria acorde con las capacidades y habilidades personales.
La necesidad de reinventarse laboralmente puede venir, en el caso de los jóvenes, por no encontrar oportunidades laborales en base a su formación, de manera que tienen que perfeccionar su currículum, adquirir nuevas competencias y mejorar su marca personal, en ocasiones incluso tienen que irse a otro país. Para las personas mayores de 45 años es más complejo. Se trata de un colectivo que, si bien igual que los jóvenes sufre los niveles más altos de paro, además forma parte del desempleo de larga duración y sufre discriminación laboral por edad.
Pasos para reinventarse profesionalmente según el colectivo
1. Trabajar la positividad
Para buscar una nueva trayectoria, los primeros pasos deben ser a nivel personal hacia el empoderamiento, trabajando la positividad para eliminar las actitudes negativas.
2. Autoestima alta
Hay que trabajar la autoestima, poniendo en marcha acciones para creer en los logros y éxitos profesionales propios, y sentir orgullo por ellos.
3. Buscar apoyo
Es muy necesario asimismo buscar apoyos, como por ejemplo el de entidades que ayuden en la inserción laboral.
Las medidas deben ser concretas en función de las características de cada colectivo. Un ejemplo puede ser el de las personas mayores 45 años y sobre todo las más mayores, que tienen más dificultades para encontrar trabajo después de los 50. Si pierden su empleo después de una larga vida laboral en la misma empresa, se sienten muy desorientadas a la hora de afrontar una nueva búsqueda. Además, se ven excluidas laboralmente, entre otros factores porque las empresas no valoran su experiencia.
Según la Fundación Adecco, el 85% de los currículums de las personas mayores de 55 años se descartan sin leer al ver la edad. Hay empresas que, en lugar de valorar la experiencia, la madurez, la templanza o la fidelidad, destacan valores negativos anacrónicos como tener menos flexibilidad, falta de competencias digitales, etc., estos son prejuicios y estereotipos muy asentados en el imaginario social. Las acciones para poner en marcha para estas personas son a más largo plazo hacia la introspección buscando fuerzas para salir adelante, teniendo como objetivo el descubrir nuevas capacidades para conseguir el éxito.
El empoderamiento y la autoestima, las principales estrategias y recursos
Para reorientar la carrera profesional, es necesaria la automotivación para acabar con el rol de víctima por no encontrar trabajo.
Entre las estrategias y recursos, está hacer una lista de objetivos reales y alcanzables que motiven personalmente, teniendo en cuenta aptitudes, aficiones y facetas propias, además de conocer las propias fortalezas y oportunidades, así como las debilidades y amenazas. Todo ello con el fin de tener la autoestima alta para hacer frente a los nuevos desafíos y especializarse en base a las necesidades del mercado laboral, desarrollando un plan con acciones concretas entre ellas la formación.
Buscar trabajo cuando no se tienen ingresos o hay dificultades para conciliar la vida familiar y laboral, etc., es mucho más complejo por sufrir desánimo y depresión. Cuando se agotan las prestaciones y no se tienen rentas, es mucho más difícil enfrentarse a buscar trabajo y más aún planificarse para nuevos desafíos laborales.
Esto se agudiza en las personas mayores. Según el informe de la Fundación Adecco Mayores de 55 años en riesgo de exclusión, para estas personas trabajar en muchas ocasiones es una necesidad imperiosa, ya que un 40% de tiene hijos económicamente dependientes, y un 35% continúa pagando hipoteca y/o alquiler. Todo ello pone de relieve la gravedad de una situación que requiere acciones inmediatas básicas.
Tener dinero o recibir prestaciones es paralelo e imprescindible ante la búsqueda activa de empleo. Los poderes públicos deben poner medidas para garantizar el cubrir las necesidades personales básicas, actualmente entre otras está la Renda Garantida (a nivel comunidad autónoma, en Catalunya) o el ingreso mínimo vital (medida estatal). Cabe señalar que actualmente estas ayudas no están cumpliendo las expectativas de quienes lo necesitan y lo solicitado, de las peticiones presentadas pocas son las aprobadas. Es necesario hacerlas más asequibles y de trámite más sencillo.
Además, hay que desarrollar las capacidades personales, entre ellas la de resiliencia para superar y hacer frente a las adversidades saliendo más fuerte. En la búsqueda de empleo es común encontrarse con contratiempos y situaciones de "fracaso" o frustración, en especial cuando se recibe un "no" continuo como respuesta en los procesos de selección. Mantener la confianza personal, tener la capacidad de persistir ante el fracaso y superar el desaliento solo se consigue con un fuerte deseo de logro. Para adquirir o poner en valor estas competencias, es muy importante el apoyo social. Hay que buscar ayuda para compartir.