Para conseguir los mejores resultados, la orientación debe formar parte del plan de estudios de forma transversal y debe estar significativamente presente tanto en Primaria como Secundaria. Cuanto antes se empiece a tratar, mejor.
Sin embargo, la orientación de hoy en día se caracteriza, desafortunadamente, por algunos sesgos bastante notorios, muy fáciles de detectar, que merman la capacidad de elegir del alumnado, en cuanto a distintas opciones formativas se refiere. Estos son, por ejemplo: el sesgo academicista, según el cual se mantiene la creencia de que la universidad es un camino mejor, de más prestigio y más prometedor, frente a otras alternativas educativas; o el sesgo de género, que transmite la errónea idea de que existen carreras formativas que, por su naturaleza o características inherentes, son más de hombres, o más de mujeres.
Con el fin de corregir estas ideas equivocadas y garantizar que el alumnado pueda elegir de manera informada y libre su futuro profesional, debemos darle a la orientación el lugar que se merece y reconocerle su importante papel en la vida formativa del alumnado. Además del reconocimiento expreso, creemos también que existen algunas propuestas específicas y realizables que podrían mejorar esta rama formativa:
- Más cantidad de información (de calidad) para el alumnado, que se presente de forma activa y de manera prolongada durante la totalidad del periodo de formación.
- Presentación y análisis, con absoluta transparencia, de la inserción laboral real de las distintas opciones académicas, ya sean carreras universitarias o ciclos formativos.
- Fomento de la orientación activa, basada en actividades reales y concretas, y no en explicaciones teóricas y folletos publicitarios.
- Diseño de más oportunidades de inmersión, de forma sistemática, en diversos oficios y profesiones. La elección informada comienza por la experimentación.
- Impulso de la participación activa de los centros de formación, así como de los recién egresados en los distintos planes de formación que estén en marcha.
- Participación implicada de las empresas en el acercamiento de las distintas profesiones al alumnado.
- Diseño y elaboración de materiales actualizados y dinámicos que capten la atención del público objetivo: videojuegos sobre las profesiones, realidad aumentada, entornos virtuales…
- Creación de recursos audiovisuales o videojuegos interactivos en los que se enseñe que las profesiones que generalmente son menos demandadas por mujeres son llevadas a cabo por mujeres.
- Puesta en marcha de un plan nacional de incentivos que promueva las carreras y ciclos que tienen poca demanda, pero una alta empleabilidad.
- Incremento de los recursos, humanos y de capital de los departamentos de orientación, para así poder estructurar y actuar de acuerdo con un plan anual de orientación, tanto en enseñanza primaria como secundaria.
Estas son solo algunas de las propuestas que consideramos que se pueden llevar a la práctica de forma relativamente sencilla. Los recursos disponibles suelen ser el principal escollo, pero, a veces, no es tanto cuestión de recursos como de ingenio e implicación. Nuestro alumnado necesita orientación de calidad, ya sea académica en las etapas iniciales como laboral en estudios superiores. Trabajemos por proporcionársela.