Durante este periodo no presencial, hemos podido comprobar en los centros educativos, cómo la relación y comunicación con las familias ha sido muy fluida. No hemos tenido problema en generar canales de comunicación entre el centro y las familias, para poder establecer una relación y llevar a cabo el proceso de enseñanza- aprendizaje que se nos ha demandado. También hay que destacar el uso de diversas plataformas, que, aunque en un primer momento se han colapsado por la demanda que se produjo, subsanado este problema han sido de enorme apoyo a los docentes para trabajar con su grupo clase.
Sin embargo, lo que hemos comprobado que la falta de experiencia docente a nivel telemático ha dado el problema de feedback con los alumnos. La falta en ocasiones de explicaciones y no poder comprobar que los contenidos se estaban asentando en el educando, ha hecho que la enseñanza se haya limitado a la realización de actividades, donde los alumnos tenían grandes dificultades en realizarlas por no tener acomodado el contenido para poder llevarlas a cabo.
Otra dificultad importante a lo largo de este periodo de confinamiento ha sido la diferencia en los recursos informáticos de las familias. Ha sido muy diferente trabajar con alumnos, puesto que algunos solo disponían de móvil, otros de tabletas y otros de ordenadores. Hemos tenido familias que no disponían de ningún dispositivo informático, o incluso que si lo tenían, debía ser usado por sus padres por motivos de trabajo. No siempre hemos podido realizar clases en remoto, porque no todos los alumnos y las alumnas tenían la posibilidad de conectarse en los horarios establecidos por los tutores.
Los aprendizajes que ha dejado el confinamiento en la educación
El confinamiento nos ha dejado una serie de aprendizajes. Resaltar sobre todo la implicación tanto de los docentes como de las familias. Los diferentes claustros, se han coordinado de manera ejemplar, dando solución en todo momento a los problemas que han ido surgiendo en los aprendizajes.
A nivel de familias, la figura de del delegado de clase ha resultado fundamental. Ha servido como punto de unión para facilitar la comunicación fluida de los diferentes miembros de la comunidad educativa, sirviendo como canalizador de información de las diferentes reuniones, tareas, clases virtuales o cualquier situación o dato que todas las familias necesitaran saber.
El uso de las TIC ha proporcionado autonomía a los estudiantes, que puede y debe de ser la base para que se produzca un cambio a nivel educativo, favoreciendo y dando un mayor peso a la digitalización en los centros educativos.También es de agradecer el enorme esfuerzo que han llevado a cabo las diversas editoriales, facilitando los libros digitalmente y proporcionando las claves de forma gratuita, que ha hecho que los docentes podamos usarlas y podamos seguir dando nuestras clases de forma telemática.
Los centros educativos, en cuestión de dos semanas, han sido capaces de adaptarse a la nueva situación que se ha producido de la noche al día. Hay muchos modelos que podemos usar.