Las ventajas de implantar políticas de igualdad de género en la empresa se han convertido en un tópico cada vez más frecuente, pero pocas veces se cuenta con las evidencias necesarias para demostrarlas. Para suplir esta carencia, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha realizado un segundo informe sobre el tema, Las mujeres en la gestión empresarial: argumentos para un cambio, en el que expone los resultados de las encuestas realizadas a casi 13.000 empresas de 70 países.El organismo de las Naciones Unidas especializado en trabajo y relaciones laborales destaca que más del 57% de las empresas encuestadas han percibido que la diversidad de género ha contribuido a mejorar el rendimiento económico. Así, casi tres cuartas partes de las organizaciones que han promovido la presencia de mujeres en cargos directivos han registrado un aumento de los beneficios de entre el 5 % y el 20 %, situándose la mayoría entre el 10 % y el 15 %.
La mayoría de los beneficios se han producido en creatividad, innovación y apertura, según más del 54 % de las empresas consultadas, seguidos de la mejora de la reputación empresarial y la evaluación eficaz de la opinión de los clientes.
Más todavía, en el informe se indica que el aumento de la integración laboral de la mujer guarda una relación directa con el desarrollo del Producto Interior Bruto (PIB), conclusión alcanzada a partir del análisis de 186 países entre 1991 y 2017.
La directora de la Oficina de Actividades para los Empleadores de la OIT, Deborah France-Massin, ha calificado estos resultados de "muy elocuentes" y ha sugerido que "las empresas deberían considerar el equilibrio de género una cuestión primordial, no solo un aspecto de recursos humanos".
Más mujeres en puestos directivos y más conciliación laboral
Sin negar lo anterior, existen algunos matices importantes. Por ejemplo, la diversidad de género produce beneficios empresariales si al menos existe un 33 % de mujeres en cargos directivos y de gestión, algo que no se cumple prácticamente en el 60 % de las empresas consultadas.
La OIT también detecta carencias a la hora de visibilizar a la mujer y facilitar su promoción en áreas estratégicas, a pesar de que casi tres cuartas partes de las empresas participantes en el estudio aseguran haber implantado políticas para fomentar la igualdad de oportunidades, la diversidad y la inclusión.
Un ejemplo de ello es el fenómeno conocido como las "paredes de cristal", esto es, la abundancia de mujeres en áreas dedicadas a la asistencia a la dirección, como los recursos humanos, las finanzas y la administración, frente a operaciones, investigación, desarrollo o contabilidad, generalmente copados por hombres y que "pueden ser un trampolín para un puesto de director general o para otros cargos en el consejo de administración". No en vano, en más del 78 % de las empresas encuestadas el director ejecutivo es hombre y, cuando es mujer, suele ser en pequeñas organizaciones.
Tampoco ayuda una cultura empresarial que exige disponibilidad "en todo momento y en cualquier lugar", advierte el informe, motivo por el que se aconseja poner en marcha políticas que fomenten la conciliación del trabajo con la vida personal y familiar, como los horarios de trabajo flexibles y las licencias de paternidad.
Por todo ello, France-Massin concluye que "la promoción de la mujer en puestos directivos está plenamente justificada. Las mujeres constituyen una formidable reserva de talento que las empresas no aprovechan suficientemente".
El informe Las mujeres en la gestión empresarial: argumentos para un cambio responde al interés de la Organización Internacional del Trabajo por conseguir una mayor representación de las mujeres en los puestos de responsabilidad. El primer informe sobre el tema se realizó en 2015 y lleva por título La mujer en la gestión empresarial: cobrando impulso.
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Imágenes: Freepik y OIT
¿Sabías que...?
- Solo el 11 % de las empresas de España tienen como directora general a una mujer.
- El 24 % de las empresas del IBEX cuentan con mujeres en sus consejos de administración.
