El arquitecto se encarga principalmente del diseño de los edificios y supervisa todo el proceso constructivo hasta su finalización. Por su parte, el arquitecto técnico es el profesional que se encarga de la fase de construcción de los proyectos, decide los materiales, los procedimientos y supervisa la construcción de los edificios.
El Grado en arquitectura es el que habilita como arquitecto. Estos estudios tienen como objetivo capacitar a los estudiantes para diseñar, proyectar y controlar todas las fases de edificación y rehabilitación de viviendas y otros espacios.
Algunas de las materias fundamentales que se estudian en el grado de arquitectura son matemáticas, física, expresión gráfica, sistemas de estructuras, suelo y cimentaciones, urbanismo, construcción o dirección de obra. También se pone especial hincapié en formar a los futuros arquitectos en el respeto por la naturaleza y el medio ambiente.
Si tus preferencias laborales están más relacionadas con el proceso de edificación, los estudios de arquitectura a los que te debes encaminar son el Grado en ingeniería de edificación. La titulación que se obtiene es la de arquitecto técnico. Durante el periodo formativo se trabajan las matemáticas y física aplicada, la expresión gráfica en la edificación, la topografía, las estructuras, los materiales de construcción o el derecho en edificación.
Además de estos dos grados, los estudios de arquitectura también incluyen otras especialidades como el grado en arquitectura de interiores, en arquitectura naval, el programa de técnico superior en arquitectura efímera. Cuando hayas finalizado tus estudios puedes acceder a másters generales y más específicos.
Otra vía de acceso a las profesiones relacionadas con la construcción es la Formación Profesional, como el programa de Técnico superior en proyectos de edificación o de Técnico en Construcción.
Perfil profesional
Los estudios de arquitectura reclaman personas que tengan interés por el diseño y habilidad artística y, en concreto, para el dibujo, que tengan imaginación y sean capaces de diseñar construcciones funcionales y estéticamente agradables para el entorno.Entre las características personales que deben tener también está la habilidad para resolver problemas; ser capaces de visualizar objetos y espacios en tres dimensiones, dotes comunicativas, don de gentes y saber trabajar y coordinar equipos.
También es fundamental para trabajar en el campo de la arquitectura tener capacidad de planificación y organización, ser preciso y metódico en la ejecución de los proyectos y saber tomar decisiones.
En los estudios de arquitectura se potencia el desarrollo de competencias como:
- Habilidades para el diseño asistido por ordenador
- Cálculo de presupuestos y costes
- Identificación de problemas y búsqueda de soluciones
- Capacidad para tomar decisiones
- Saber gestionar los cambios
- Aceptar críticas
- Orientación al resultado
- Capacidad negociadora
- Realizar inspecciones y supervisar el trabajo
- Comunicación y colaboración con otros profesionales
- Conocimientos de normativas de seguridad y de edificios
Salidas profesionales
El ámbito laboral de los profesionales de la arquitectura se vio afectado por la crisis, pero actualmente las perspectivas laborales son más positivas.Las personas que realizan estudios de arquitectura pueden incorporarse al mercado laboral como arquitectos. Este profesional puede trabajar en diferentes tipos de proyectos, desde la planificación de nuevas viviendas y conglomerados urbanísticos a la rehabilitación de edificios y viviendas ya existentes.
Sus responsabilidades están relacionadas con el diseño de los planos de acuerdo a las indicaciones de los clientes, la planificación del tipo de construcción, de los materiales y del coste de la obra. También se encargan de la investigación de los terrenos y del contacto con urbanistas, funcionarios de control de edificios y de las normas de salud y seguridad.
Como arquitectos técnicos algunas de las actividades y funciones son similares a la de los arquitectos. Pero estos profesionales están orientados al control de los procesos de edificación. Sus responsabilidades están relacionadas con la elaboración de planos, elección de los materiales y el seguimiento de todas las fases de construcción. Para ello, coordina su trabajo con el arquitecto, el topógrafo y otros profesionales del sector.
