Un "número considerable de orientadores y orientadoras" se han quejado ante la asociación de que les han asignado clases de asignaturas troncales o instrumentales como Lengua Española en 1º de ESO, Valores éticos, Economía y Educación Plástica y Visual, entre otras. "Esta práctica anómala ocurre porque algunos directores no valoran el trabajo del orientador ni tampoco la orientación educativa en un centro", afirma Ana Cobos, presidenta de la COPOE, en declaraciones a Educaweb.
Aunque la asociación no cuenta con datos cuantitativos concretos sobre cuántos orientadores u orientadoras han tenido que dar clases y dejar a un lado su labor, Cobos asegura que esta práctica la han tenido que asumir los profesionales de la orientación en todo el territorio español: "Hay compañeros que cuando viven una situación así la denuncian en la asociación o a sus sindicatos, otros no. A medida que van surgiendo los casos nos los van haciendo llegar".
Este hecho, prosigue, puede conllevar a que aumente el índice de fracaso escolar entre los estudiantes "porque cuando un orientador tiene tiempo para poder atender cada caso de un alumno o alumna, y poder ver cuál es su necesidad educativa, los jóvenes estarán mejor atendidos. Eso se traduce en un mayor desempeño y, por consiguiente, en la prevención del abandono escolar a largo plazo".
Asignar labores docentes a los orientadores u orientadoras constituye un obstáculo para llevar a cabo una orientación educativa, psicopedagógica y profesional de calidad "porque no solamente se quitan horas de trabajo de orientación, sino que también el alumnado pierde porque deja de recibir clases de un verdadero especialista en la materia", explica la presidenta de la COPOE en declaraciones a Educaweb.
¿Cómo lograr una orientación de calidad en los centros?
La COPOE solicita públicamente, a través de su comunicado, que se cursen instrucciones a los centros educativos para que se eviten, para el curso próximo, atribuciones docentes a orientadores y orientadoras, "anómalas y contrarias a lo dispuesto en las normas de más alto rango, LOE y LOMCE, y que sea posible llevar a cabo la orientación educativa de calidad que nuestro Estado necesita".
Por su parte, la presidenta de la asociación explica a Educaweb que entre las medidas más urgentes para evitar este tipo de prácticas y mejorar la calidad de la orientación en los centros educativos se tendría también que instaurar "la ratio que aconseja la Unesco de un orientador u orientadora por cada 250 estudiantes, que es la misma de Finlandia".
La COPOE incluye cada año esta reivindicación en las propuestas de mejora para el sistema educativo que anualmente sugiere y hace públicas. "Nuestra misión es ser un interlocutor con la administración educativa para trabajar en pro de la mejora de la calidad de la educación desde nuestra perspectiva y perfil profesional y técnico del orientador".
Otra de las recomendaciones para avalar la calidad de la orientación en los centros educativos radica en asegurar que los orientadores y las orientadoras de los centros educativos tengan el perfil técnico necesario, como una titulación en Psicología, Pedagogía y/o Psicopedagogía. Por lo que habría que cambiar el sistema de oposiciones de estos profesionales.
"Actualmente la normativa permite que titulados de cualquier otro ámbito, con un máster relacionado con la docencia, pueda opositar para tener una plaza de orientador en un centro educativo", explica Cobos. Esto significa que se pueden encontrar a graduados de Ingeniería realizando funciones de orientadores y, aunque estos hayan superado las oposiciones, "no tienen la preparación suficiente para, por ejemplo, detectar si un niño tiene un trastorno del espectro autista, o trastorno emocional", tarea que sí pueden desempeñar los profesionales de la orientación.
Si eres docente y estás buscando formarte, en Educaweb podrás encontrar diferentes cursos que pueden interesarte.