Para realizar el estudio, Gimeno ha realizado una investigación documental sobre el tema, ha aplicado encuestas a 63 estudiantes del tercer curso de ESO de un instituto público de la provincia de Barcelona, ha entrevistado a Miquel Àngel Prats Fernández, director del Grado en Educación Infantil de la FPCEE Blanquerna de la Universitat Ramon Llull, y ha ideado una propuesta educativa que invita a los propios estudiantes, guiados por los docentes, a crear contenidos educativos en vídeo que puedan ser vistos en las plataformas móviles.
"La adicción a las TIC es mucho más común de lo que la gente imagina. La mayoría de los alumnos encuestados respondieron afirmativamente a favor de las conductas relacionadas con el uso abusivo del smartphone. De hecho, un tercio de ellos se consideró abiertamente adicto a las TIC, mientras que el resto lo negó a pesar de presentar conductas a favor del uso abusivo de dichas tecnologías", ha detallado Gimeno a Educaweb, quien además considera que el uso indebido del smartphone en el aula no puede atribuirse únicamente a un problema de adicción a los dispositivos, sino también a una falta de adaptación a la forma que tiene esta nueva generación de asimilar la información y entender el mundo.
Por ello, entre las principales conclusiones de su investigación destaca que, ante el uso indebido de los dispositivos móviles en el aula, los centros educativos deberían actuar de una forma preventiva: informando debidamente a los responsables del alumnado ante un posible caso de adicción y educando sobre el uso responsable de las TIC mediante la adaptación de contenidos educativos a los móviles, algo que además favorecerá la comprensión e interés hacia los conocimientos.
Para llevar a cabo dicha prevención, hay que tener en cuenta las características que definen a la nueva generación de jóvenes, entre las que destacan la multitarea, la creación de contenido y el dinamismo en la transmisión de información. "Es precisamente mediante actividades que requieren el uso responsable del smartphone en el aula que se consigue educar en favor del uso responsable de las TIC, previniendo a su vez los casos de adicción y favoreciendo además la atención y aprendizaje de los alumnos", explica Gimeno en su estudio.
¿Y qué piensan los estudiantes sobre el uso del móvil en clase?
Los resultados de las encuestas revelan que los estudiantes encuestados reconocen que realizan un uso indebido de este dispositivo electrónico por temas que podrían estar relacionados tanto con un problema de adicción como con un problema de gestión del uso responsable del mismo en clase.
De acuerdo con el estudio, el 95,2 % del alumnado considera que la utilización del móvil en los centros educativos es necesaria; el 90,5% cree que es bueno el uso de aplicaciones educativas en las aulas, y el 65,1% cree que en los institutos se debería educar sobre el uso responsable del móvil.
Sin embargo, la mayoría de los encuestados reconoce que emplea el móvil de una forma irresponsable en clase: el 69,8% desvela que lo utiliza para distraerse mientras explica el profesor; y el 46%, que lo utiliza para resolver exámenes. Asimismo, prácticamente por unanimidad, el 95,2% cree que no debería prohibirse el uso de teléfonos móviles en los centros educativos.
También se ha confirmado que el móvil con internet es el dispositivo más utilizado entre los jóvenes de 14 a 16 años, y que la mayoría (el 69,8 %) suele dedicarle 3 horas o más al día para ocio, entretenimiento y redes sociales. Este uso se concentra principalmente en aplicaciones como Instagram (76,2%) y WhatsApp y YouTube (57,1%).
Una propuesta educativa basada en los smartphones, YouTube y en la participación del alumnado
En su trabajo de investigación, Gimeno incluye una propuesta docente basada en el uso de móviles como herramienta de creación de contenidos. Esta consiste en crear a través del smartphone, y en grupos de entre 2 y 4 alumnos, vídeos explicativos sobre un tema cualquiera de la asignatura correspondiente, para subirlo al canal YouTube de la clase. De esta forma, se podrá ir construyendo una videoteca disponible para el resto del alumnado, que les ayudará a resolver dudas, consultar conceptos y compartir o aportar información sobre el tema que se expone.
"Los alumnos podrían no sólo producir, sino compartir, aprender, preguntar e iniciarse en el mundo de la creación de contenido de una forma familiar al tipo de información que consumen, aumentando y facilitando al mismo tiempo el aprendizaje, la motivación por realizar los ejercicios propuestos desde el centro educativo y una educación respecto al uso responsable de las TIC", ha explicado el investigador a Educaweb.
En su propuesta, Gimeno sugiere el uso de YouTube como herramienta de difusión de los vídeos y que sean los propios estudiantes los creadores de estos, ya que "diversos estudios demuestran que los alumnos aprenden más y mejor cuando son personas del mismo nivel quienes explican los contenidos".
Para el investigador, el móvil permite crear y dar vida a ideas que en el pasado eran imposibles, también en el ámbito educativo, como la creación de contenido multimedia (videos, presentaciones interactivas…), proyectos sociales o medioambientales, campañas de crowdfunding, desarrollo de aplicaciones, encuestas online, creación de quiz o videojuegos, plataformas de intercambio con centros educativos de otros países, etc.
"El límite es la imaginación y la motivación para readaptar los contenidos al sinfín de posibilidades que ofrece el uso de dispositivos con conectividad, algo que además de educar en favor del uso responsable de las TIC, aumentará sin duda la motivación y participación de los alumnos en clase, y por qué no, la pasión por aprender", ha añadido en entrevista.
A través de su trabajo de investigación, Gimeno sugiere que el profesorado tome conciencia de que "el móvil no es el enemigo, sino una herramienta educativa muy poderosa y útil que muchos chavales aún no saben utilizar, y por eso se les debe enseñar a hacerlo. Por el bien de su futuro y el de toda la sociedad. Desde los centros debe enseñarse que puede ser una fuente de distracción y aislamiento que limite sus vidas o una herramienta de aprendizaje y catalizador de ideas y proyectos".
¿Qué tecnologías aplicar en clase y cómo presentar los contenidos?
De acuerdo con el estudio, los problemas relacionados con el uso indebido del móvil en clase podrían resolverse con la aplicación de métodos educativos basados en:
- Usar aplicaciones tecnológicas, incluso multipantalla, con los que el alumnado se sienta ya familiarizado fuera del centro educativo
- Aplicaciones interactivas y redes sociales como Twitter y EdPuzzle
- Utilizar ejemplos y situaciones reales, dotando a los problemas de un sentido práctico
- Introducir en los móviles problemas que generen debates éticos, ya que esta generación tiene una fuerte necesidad de participación y una gran preocupación por el futuro del planeta
- Reforzar conceptos y explicaciones mediante imágenes y vídeos
- Promover los trabajos que requieran el uso de un dispositivo electrónico
Tres buenas prácticas para convertir a los móviles en aliados educativos
En su estudio, Gimeno Martín ha recopilado algunas buenas prácticas para ejemplificar cómo pueden los docentes adaptar sus contenidos educativos a las plataformas móviles, a fin de convertirlos en aliados a la hora de impartir sus asignaturas y, al mismo tiempo, educar a los jóvenes en un uso responsable de estos dispositivos. He aquí algunas de ellas.
- Varios centros escolares de Torrent, en Valencia, han puesto en marcha un proyecto mediante el cual los profesores enseñan la asignatura de Ciencias sociales a través de Instagram. El proyecto, denominado Histogram, consiste en lanzar un reto al alumnado a través de esta aplicación y ellos deben resolverlo con pistas que se les han dado en clase y otras que buscan por Internet.
- En el Instituto Público de las Lagunas, en Mijas Costa (Málaga), un profesor enseña Historia de España a sus alumnos de 2º de ESO a través de WhatsApp. Ha creado un grupo para explicar el tema de la Alta Edad Media en el que cada nuevo conquistador de la Península pasaba a ser el administrador y lanza retos para que los estudiantes los solucionen a través de esta plataforma.
- El canal YouTube Unicoos, del profesor madrileño David Calle, candidato a Best Teacher Prize en 2017, constituye otro ejemplo de cómo utilizar la tecnología para fines educativos. El canal cuenta con vídeos de entre 10 y 30 minutos que permite a miles de estudiantes resolver sus dudas relativas a asignaturas como matemáticas, física o química, así como interactuar entre ellos para solucionarlas.
Transferir conocimientos y propuestas provenientes de trabajos de investigación de máster o doctorado constituye una manera de aportar a nuestros lectores ideas y buenas prácticas que puedan contribuir a mejorar la educación. Es por ello que en Educaweb queremos dar visibilidad a trabajos de investigación sobre temáticas de interés para docentes y profesionales de la orientación académica y profesional.
¿Sabías que…?
- La Organización Mundial de la Salud define la adicción a las TIC como su uso compulsivo, repetitivo y prolongado con incapacidad para controlar o interrumpir su consumo y con consecuencias sobre la salud, la vida social, familiar, escolar o laboral.
- En Francia ya se ha anunciado la prohibición de los móviles en los centros educativos, mientras que en España se debate si prohibirlos también o educar sobre el uso responsable de la tecnología en el aula.