La International Association for Vocational and Educational Guidance (IAEVG) acaba de hacer públicas las recomendaciones éticas (Ethical Guidelines) que han de cumplir todos los miembros de la asociación especializada en orientación académica y profesional, pero que también buscan servir de referencia a otros profesionales, así como informar al público de lo que puede esperar de los orientadores y orientadoras profesionales.Las primeras pautas éticas se realizaron 1995, por lo que su actualización se había convertido en una prioridad estratégica para la entidad, tal y como ha explicado Nancy Arthur, vicepresidenta de la IAEVG y responsable de su revisión. Artur también ha comentado que los principales temas a revisar se centraron en tres áreas: el uso de la tecnología, la diversidad y la justicia social, y la sostenibilidad y la orientación verde (green guidance).
Los estándares cuentan con un preámbulo y cinco apartados donde se recogen los principales deberes que han de cumplir los profesionales de la orientación académica y profesional para desempeñar su trabajo de manera excelente. En el primer punto se mencionan las responsabilidades éticas hacia los clientes, como tener en cuenta sus necesidades de manera holística, respetar su derecho a tomar decisiones independientes y socialmente justas o evitar los conflictos de intereses que puedan interferir en su independencia profesional.
El documento también dedica un apartado a las actitudes hacia los colegas y otros profesionales asociados, como mantener relaciones de cooperación para facilitar la orientación académica y profesional óptima o realizar consultas a otros colegas para aclarar cualquier duda, al tiempo que se respeta la confidencialidad del usuario.
Un tercer aspecto recogido en las Ethical Guidelines se refiere al comportamiento que debe mantenerse hacia el gobierno, los empleados, las entidades comunitarias (community agencies) y los miembros de la comunidad. La IAEVG recomienda familiarizarse con las políticas existentes en educación, formación, empleo e inclusión social. Más todavía, los profesionales de la orientación han de cooperar con responsables públicos y privados para superar las barreras estructurales y sociales que impiden a las personas acceder a servicios de orientación de calidad.
Además, se mencionan las responsabilidades hacia la teoría y la investigación, que se concretan en la obligación de participar en estudios que respeten los estándares de investigación y en compartir los resultados para mejorar las condiciones de vida de clientes y público.
Finalmente, se incluyen normas para fomentar el aprendizaje y desarrollo profesional continuo. Desde la IAEVG se recomienda reflexionar continuamente sobre los principios humanísticos en los que se basa el comportamiento ético, al mismo tiempo que se presta atención al contexto sociopolítico. Para ello, se formulan algunas preguntas que invitan a tener en cuenta la tensión entre economía y medio ambiente, la justicia social, el contexto cultural de las personas, etc.
Las Ethical Guidelines fueron aprobadas en la asamblea general de la IAEVG, durante la celebración de la Conferencia Internacional de la entidad que se celebró en México entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre de 2017. El congreso se centró sobre todo en la orientación educativa de los más jóvenes, si bien acogió simposios y comunicaciones sobre diferentes aspectos relacionados con la orientación académica y profesional.
