La empresa de contenidos educativos Pearson cree que no. Y así lo corrobora su informe Future of Skills: Employment in 2030 (El Futuro de las Habilidades: Empleo en 2030), un estudio hecho con la colaboración de investigadores de Nesta y Michael Osborne, de la Oxford Martin School, que afirma que el futuro del empleo es mucho más brillante del que se augura.
En concreto, su estudio, que está centrado en el mercado laboral estadounidense y británico, apunta que tan sólo uno de cada cinco trabajadores se encuentra en un sector que vaya a disminuir su oferta y, además, asegura que los empleos relacionados con sanidad y educación tendrán un crecimiento exponencial a causa de la tecnología y el aumento demográfico. También destacan por su aumento los trabajos relacionados con los deportes, la justicia y la ingeniería.
Fuente: Future of skills:Employment in 2030, Pearson.
Por otro lado, la investigación también subraya que siete de cada diez trabajadores se encuentran en empleos con gran incerteza sobre su futuro. Sin embargo, el informe es positivo respecto a su futuro, ya que aseguran que existen muchas vías para preparar a estas personas para lo que está por venir.
Las habilidades: las vías para el empleo del futuro
Preparar a este grupo de la población conlleva enseñarles diferentes habilidades que les permita adecuar su perfil a las demandas del mercado laboral del futuro. El estudio afirma que las llamadas 21st century skills (habilidades del siglo 21) –normalmente agrupadas en habilidades de aprendizaje e innovación, de alfabetización digital y de la gestión de la carrera- seguirán siendo relevantes, pese a que surgirán otras competencias importantes.
Concretamente, en la investigación se determinan aquellas capacidades que, según se espera, se consolidarán como primordiales en el mercado estadounidense y británico. En Estados Unidos se considera que serán relevantes las habilidades interpersonales, tales como el servicio de orientación o las pedagógicas, mientras que en Reino Unido tendrán más relevancia las aptitudes relacionadas al pensamiento orientado a sistemas, como las capacidades de análisis o las actuaciones ante complejos conjuntos de información.
De los resultados del estudio también se desprende la certeza de que tanto habilidades como conocimientos serán imprescindibles en la economía del futuro, y se vaticina que los puestos de trabajo necesitarán un rediseño para equilibrar las competencias humanas con la automatización tecnológica.
Metodología innovadora
El estudio se inicia con un análisis de tendencias. Una metodología con la que, además de tener en cuenta la evolución de la tecnología, se evalúa la influencia de la globalización, el cambio demográfico y la urbanización, la sostenibilidad del medio ambiente, el incremento de la desigualdad y la incertidumbre política.
Tras esto, grupos de expertos (12 de Estados Unidos y 13 de Reino Unido) debatieron sobre 10 ocupaciones en base a las tendencias anteriormente comentadas, y se creó un algoritmo fundamentado en sus predicciones para así vaticinar los trabajos con más demanda en el futuro. Finalmente, apoyándose en los resultados sobre el mercado laboral, se pronostican las habilidades necesarias para el futuro y se exponen diferentes ideas para la acción.
Esta metodología se distingue de otras realizadas en estudios similares, ya que tiene en cuenta la influencia de diferentes tendencias y utiliza la opinión de expertos para crear un algoritmo y simular, a través de un programa informático, los empleos y habilidades del futuro.