Esta semana se ha presentado el Modelo de Escuela Saludable, una iniciativa promovida por las empresas AENOR, Nútrim y Cualtis que establece los requisitos para desarrollar un Sistema de Gestión de Escuela Saludable que permitirá a los centros educativos certificar que protegen y promueven la salud, la actividad física, la educación socioafectiva y las condiciones del entorno.Los datos aportados durante la presentación del modelo alertan de que España ha abandonado el top ten global de salud, pues ha pasado del puesto número 7 al 23 sobre un total de 188 países, según un estudio reciente para las Naciones Unidas publicado en la revista The Lancet. Además, el informe de Actualización de la Obsesidad 2017 de la OCDE asegura que las tasas de obsesidad seguirán creciendo como mínimo hasta el 2030. En España, el organismo internacional estima que el 21% de la población del país padecerá este problema para esa fecha.
Por lo que se refiere a los menores, la obsesidad infantil se ha mantenido en torno al 18% entre 2011 y 2015 en España, según el estudio Aladino realizado entre 11.000 niños de 6 a 9 años de todas las Comunidades Autónomas. Y el 85% de los niños y niñas del país no realiza el mínimo de actividad física recomendada por la Organización Mundial de la Salud, unos 60 minutos de actividad física de intensidad moderada/vigorosa.
Por todos estos y otro datos, los creadores del Modelo estiman que la promoción de la salud en la escuela generará un impacto positivo en el bienestar de los menores y su entorno, si bien se trata de una tarea que requiere de la colaboración de toda la sociedad. Y no son los únicos, pues un 97% de los profesores consultados en un estudio que analizaba la situación de la educación para la salud en primaria y secundaria consideraba que la materia Educación para la Salud debería ser prioritaria, frente al 60% de los centros que dedicaban poco más de una hora al mes a la temática.
Un modelo para la mejora continua
El Modelo de Escuela Saludable se basa en la estructura de la mejora continua, que incorpora el ciclo Planificar, Hacer, Verificar y Actuar (PFVA en catalán) y puede integrarse en otros sistemas de gestión como el Sistema de Gestión de la Calidad descrito en la norma UNE-EN ISO 9001. El Modelo verificará que los centros educativos que voluntariamente se acojan a él cumplen con ciertos requisitos en cinco ámbitos:
- Promoción de la salud (por ejemplo, creando hábitos higiénicos bucodentales);
- Alimentación saludable (desarrollando actividades que prevean trastornos alimentarios);
- Actividad física (promoviendo el ejercicio físico y el deporte);
- Educación socioafectiva (previendo el acoso escolar o la discriminación);
- Control del entorno (creando espacios seguros).
Las primeras escuelas en implantar este modelo serán los centros catalanes Escola Virolai, Col·legi Badalonès y Escola Dominiques de l'Ensenyament. Estas tres escuelas, junto con la Escola Sant Josep Oriol, han colaborado con las tres empresas en el desarrollo del Modelo.
ANENOR es una empresa especializada en certificación y evaluación de la calidad. Nútrim tiene como misión cuidar y proteger la salud en el ámbito educativo, comunitario y empresarial. Y Cualtis es una compañía dedicada a la prevención de riesgos laborales.
