Hablando con el alumnado, resulta difícil saber si lo han conseguido. En algunos casos se ve claramente que las actividades han suscitado interés. Es lo que ocurre en el stand del Instituto de Investigación Biomédica de la Universitat de Barcelona. Un grupo de alumnos de 4º de la ESO del Instituto Hipàtia d'Alexandria en Llissá de Munt (Barcelona) atiende atentamente las explicaciones de las investigadoras: "Aquí tenéis dos microscopios y dos muestras de dos pulmones. A ver si descubrís cuál de los dos tiene un tumor". "El de las pelotas", responde rápidamente el más avispado. "Muy bien, un tumor hace que se generen células muy rápido y estas tienen forma de círculos". "¿Y cómo se salvan vidas?", pregunta el más curioso. "Con quimioterapia, por ejemplo. Esta técnica acaba con las células que se reproducen muy rápido. Por eso se cae el pelo, porque sus células también se reproducen rápidamente".
Otro grupo de alumnas del Instituto Joan Salvat-Papasseit de Barcelona asegura haber disfrutado mucho en una actividad organizada por la Fundación Retina Plus que consiste en ponerse unas gafas que permiten introducirse virtualmente en un cuerpo humano y ver cómo la diabetes va deteriorando los diferentes órganos vitales. "Parecía como si realmente estuvieses dentro", explica una de ellas. "Yo hasta me he dado un susto cuando me he girado y he tenido la impresión de que me chocaba con una célula", añade otra. El proyecto que promueve la doctora Marta Figueroa busca informar sobre la diabetes y prevenirla, ya que esta enfermedad puede llegar a ocasionar la muerte, advierte una de las responsables del estand.
En otro lugar un grupo de estudiantes parece pasar un buen rato con una especie de Pasapalabra promovido por la empresa farmacéutica Bayer. "Empieza por G. Fuerza que ejerce la Tierra sobre un cuerpo hacia su centro". "¡Gravedad!", responden todos al unísono. "Empieza por H. Apellido del inventor de la aspirina". Silencio. Una pista para el grupo que va perdiendo. "Es el nombre de una empresa de álbumes digitales". "¡Hoffmann!".
No mucho más lejos, un grupo de jóvenes disfruta de un taller de vinilación recortando un tipo de papel de látex tan resistente que puede colgarse de una fachada. Se trata del taller promovido por la empresa de tecnología e impresoras HP y en él pueden hacerse una funda de móvil a medida y entrar en el sorteo de una impresora de bolsillo.
Mucho más lejos, en el estand de la Cruz Roja, una joven observa cómo se realiza un rescate en el mediterráneo con unas gafas de realidad virtual mientras otro grupo comprueba cómo las personas con movilidad reducida pueden manejar una tablet con la nariz o hacer una llamada de emergencia con el móvil. Ahora bien, el espacio donde hay que hacer más cola, con diferencia, es en el de la empresa Seat. Allí uno puede sentarse en unos asientos que simulan una montaña rusa y disfrutar de un paseo por Barcelona con solo ponerse unas gafas de realidad virtual.
Con mayor contenido pedagógico o no, lo cierto es que la mayoría de los preguntados reconoce que se lo está pasando bastante bien, que es un gusto salir de clase y "no estar todo el día encerrado". Otros también reconocen que les hace ilusión que les hagan "regalos, aunque sólo sean unos caramelos". Los menos apuntan que lo que han visto en el YoMo les ayuda o ayudará a entender mejor los conceptos que les explican en clase. Y sobre la libertad de movimientos, no hay consenso. Unos afirman que les encanta que les dejan a su aire, mientras que otros echan de menos más orientación y acompañamiento.
El profesorado, aprendiendo a moverse entre la "cacharrería"
Sobre el complicado equilibrio entre autonomía y orientación técnico-científica habla precisamente una de las profesoras que participa en el mSchools, un espacio donde profesorado y expertos intercambian conocimientos y experiencias sobre Ciencia y Tecnología. "Equilibrar la libertad y la guía es fundamental en el tinkering, que se puede traducir como trastejar en catalán y cacharrear en castellano. Se trata de trabajar con las manos una gran varidad de materiales de forma lúdica e improvisada con el fin de resolver un problema y recibiendo feedback inmediato", explica la investigadora del Centre de Recerca per a l'Educació Científica i Matemàtica de la UAB.
Dos profesores de la Escola Sadako en Barcelona también aprovechan el espacio para explicar cómo utilizan las nuevas tecnologías para desarrollar competencias lingüísticas, matemáticas y transversales como la cooperación, la planificación y la creatividad. En concreto, los estudiantes de dicho centro han de elaborar el informativo 5SAK que cuenta con cinco secciones: 5 blocs, donde han de sintetizar el contenido de 14 bitácoras de la escuela; 5 dies, dedicado a la agenda semanal; 5 cèntims, que consiste en un reportaje; 5 sentidos, donde realizan una entrevista a alguien del centro; y 5 sous, donde realizan una escuesta y analizan sus resultados.
En mSchools no sólo participan centros educativos y profesorado, sino también empresas y fundaciones como el Human Age Institute del grupo Manpower, cuyos representantes explican las ocho competencias que los más jóvenes pueden acreditar a través de la plataforma Power_U Digital: aprender a aprender, habilidades básicas en Matemáticas, Tecnología y Ciencia, comunicación en la lengua materna, comunicación en una lengua extranjera, iniciativa y emprendimiento, conciencia cultural, responsabilidad social y civil, y habilidades digitales.
Justo al lado se encuentra la Zona de Recursos Educativos, un espacio dirigido fundamentalmente al profesorado donde se encuentran entidades como el Centro de Recursos Específicos de Apoyo a la Innovación y la Investigación Educativa (CESIRE), la Fundación Catalana para la Investigación y la Innovación (FCRI), el Parque Astronómico Montsec, el proyecto Xplore Health promovido por la Obra Social La Caixa y el IrsiCaixa Institute for Aids Research y Educaweb, entre otras.
Algunas paradojas
El profesorado, en general, se muestra satisfecho con la jornada. Los más entusiasmados la conciben como "oportunidad fantástica". Los menos critican la existencia de espacios comerciales en una iniciativa que debería poseer, a su juicio, un carácter más divulgativo o formativo. Tampoco faltan quienes lamentan que el exministro José Ignacio Wert haya reducido las horas de la asignatura de Tecnología. "Es paradójico que digan que faltan vocaciones científicas y, al mismo tiempo, reduzcan las horas de clase", comentan un grupo de profesores del Instituto Sòl-de-riu en Alcanar, Tarragona.
"Tecnología, Ingeniería y Mujeres. Estas son las tres palabras que más hemos oído", señalan dos profesoras de la Escola Pere Rosselló en Calonge (Girona), en alusión a la falta de vocaciones científico-tecnológicas entre las mujeres. Durante el recorrido por el YoMo Festival Barcelona 2017 pocas jóvenes han afirmado querer dedicarse a las disciplinas STEAM y, cuando lo han hecho, estas se decantan sobre todo por la rama sanitaria y, en concreto, medicina.