Tras una semana de descanso, el alumnado cántabro vuelve al cole. Esta ha sido la primera de las cuatro semanas festivas que Cantabria contempla dentro de su nuevo calendario escolar. En otros países europeos ya existen proyectos similares a este que, según palabras del consejero de educación cántabro, Ramón Ruiz, es un calendario que "apuesta por una distribución más racional y equilibrada de los tiempos escolares".Este descanso, aprobado por la consejería de Educación, Cultura y Deporte de Cantabria el 27 de junio de 2016, no ha dejado indiferente a nadie y ha creado disparidad de opiniones en torno a su funcionalidad dentro del mundo académico.
La Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Cantabria (FAPA) ha mostrado su desacuerdo con el desarrollo de esta nueva medida. Su presidenta, Leticia Cardenal, ha declarado que la nueva jornada se ha implantado de manera "caótica" y "sin consensuar con la comunidad educativa"
Por otro lado, sindicatos de docentes como la Asociación Nacional de Profesores Estatales (ANPE) se han mostrado contentos con este nuevo sistema. El consejero Ruiz también ha mostrado su satisfacción con los resultados del transcurso del curso en Cantabria y ha afirmado que el año académico se está desarrollando con "normalidad".
La conciliación familiar, uno de los puntos de discordia
Uno de los puntos centrales del debate gira en torno a la conciliación laboral y familiar en los parones que se suceden cada dos meses de curso. ANPE no contempla esta problemática, ya que considera que tan sólo se ha cambiado de lugar cuatro días lectivos, y por ello no deberían existir problemas para la conciliación.
Cardenal, en cambio, se muestra pesimista en este punto, ya que bajo su punto de vista "esta semana de vacaciones se supone que es para que los niños descansen y no van a descansar" y los únicos beneficiados "lamentablemente son los maestros".
Otra razón que no convence a Cardenal es el plan que la consejería de Cantabria ha puesto en marcha para hacer frente a los cierres de comedores escolares durante estos periodos de descanso. Según Cardenal, este plan es "insuficiente" y "va a haber familias que van a seguir sufriendo el cierre de los centros".
Ante esto, el consejero Ruiz ha asegurado que, si bien es verdad que existe "un problema alimentario en una parte de la población infantil de Cantabria, la más debilitada", con el plan de apertura de comedores y actividades lúdicas se responde a las necesidades de las familias.
Diferencias entre el antiguo y el nuevo calendario escolar
Los días lectivos siguen siendo los mismos que en cualquier otra comunidad autónoma, pero no su repartición. En el sistema tradicional, el alumnado tiene tres periodos de vacaciones; en cambio, con el nuevo sistema el alumnado cántabro tendrá una semana festiva cada dos meses de trabajo en las aulas.
La principal novedad se encuentra en la semana festiva del 31 de octubre al 6 de noviembre, ya que los otros tres descansos son muy similares a los que ya existen. El segundo descanso se produce en Navidad, del 24 de diciembre al 8 de enero. Tras esto, en febrero se produce otro descanso del 23 al 28. En abril existe otra semana de descanso del 13 al 23 que incluye las festividades de Semana Santa y finalmente las vacaciones estivales que empiezan el 23 de junio.
Además de esta repartición en bimestres, en este nuevo sistema también existen novedades a nivel de evaluación. Según palabras del consejero Ruiz, estas serán "intensas y más numerosas, y no unos trimestres tan largos como los actuales".
Habrá que esperar al final del curso para hacer balance y comprobar si la medida ha contribuido a mejorar el aprendizaje de los estudiantes o no, que es de lo que se trata. Mientras tanto, ¿qué piensas?, ¿te parece una medida efectiva?
