¿Te gusta organizar excursiones con tus amigos? ¿Eres de los que lo planifica todo hasta el último detalle? ¿Tienes una agenda amplia con todo tipo de contactos? Es hora de que te plantees si tu futuro laboral está en la organización de eventos.En este especial te explicaremos qué formación debes cursar y cómo conseguir ser un buen organizador y planificador de eventos de todo tipo.
¿Qué tengo que estudiar para ser organizador de eventos?
Como es una profesión que abarca muchas especialidades (cultura, fiestas privadas, tradiciones, eventos institucionales, etc.) puedes acceder a ella desde los grados de Comunicación, Gestión Cultural o Publicidad y Relaciones Públicas. Desde 2010 la Universidad Camilo José Cela (UCJC) tiene un grado oficial de Protocolo y Organización de Eventos, que te forma específicamente en este tema. El Grado en Periodismo + Protocolo y Organización de Eventos te prepara también para las relaciones institucionales, la comunicación corporativa, la imagen y reputación corporativa. Por otro lado, si te interesa el turismo, puedes cursar una formación de técnico superior en agencias de viajes y gestión de eventos para convertirte en un profesional de la programación y poder operar viajes combinados y todo tipo de eventos.Otra vía de acceso a la profesión es a través de cursos de formación continua, másters y especialidades. Encuentra todos los diferentes cursos y grados aquí.
¿Cuál es el perfil del organizador de eventos?
El perfil del profesional de la organización de eventos es muy completo. Según la especialidad que escojas, tu formación profundizará más en unos aspectos que en otros. Pero por lo general necesitarás dominar estas 5 competencias:1. Ser detallista, creativo y social.
Aparte de ser la persona que se encarga de coordinar el evento, el organizador de eventos es también la que lo diseña, por lo que debe tener una gran capacidad creativa y realista al mismo tiempo. Debe saber comunicarse y trabajar en equipo para que todo salga como se ha planificado. Un buen profesional debe tener el control sobre todo el evento que se esté organizando de principio a fin, contando con posibles imprevistos y conflictos, por lo que tiene que saber mantener la calma y el control en todo momento.
2. Tener un conocimiento global de cultura y sociedad.
Como es un oficio en el que te puedes encontrar con clientes de distintos ámbitos, debes tener una visión social y cultural. Para organizar el evento adecuado al cliente es muy importante estar al corriente de sucesos importantes, cambios y avances. Para ello debes trabajar en otras disciplinas, aunque no estén directamente relacionadas con la tuya, como por ejemplo la comunicación, las relaciones públicas e incluso la restauración y hostelería.
3. Tener conocimientos empresariales.
Si el cliente te da cierta libertad a la hora de diseñar un evento, estás de suerte. Puedes demostrar tus habilidades creativas, pero no olvides que esto requiere también saber equilibrar la originalidad con la realidad. Como organizador debes saber cuáles son tus límites dentro del presupuesto, en qué hace falta invertir más, de qué manera puede ser más rentable, disponer de un amplio abanico de proveedores, etc. La formación en gestión y dirección de empresas o en economía te ayudará a valorar mejor todos estos aspectos.
4. Dominar las TIC y los audiovisuales.
Hoy en día es muy importante tener conocimientos informáticos y digitales en cualquier empleo. Aunque puedas contar con un equipo de informáticos, fotógrafos, etc. no olvides que estás al mando de todo el evento y que, cuanto más estés al día de la producción, mejor podrás gestionarla.
5. Ser proactivo y flexible.
A menudo te encontrarás con clientes que no tienen una idea clara, o por el contrario, tienen una propuesta muy definida pero poco realista. El organizador de eventos debe ser capaz de proponer ideas nuevas que vayan en la línea de lo que quiere el cliente, a la vez que debe tener capacidad de adaptación a sus propuestas.
