Las experiencias en el extranjero tienen un impacto muy positivo en la vida personal y profesional de los participantes, según un estudio realizado en el marco del proyecto MOB G.A.E., cofinanciado por la Comisión Europa a través del programa de aprendizaje permanente. El estudio analiza cómo las experiencias en el extranjero impactan en el crecimiento personal, el desarrollo profesional y en la conciencia de ser ciudadano europeo de los participantes.
A nivel personal, los encuestados consideran que la experiencia ha tenido un impacto en su autonomía, su autoestima, y en el aprendizaje de habilidades generales. En las entrevistas personales declararon que la experiencia les ayudó a "gestionar el estrés y trabajar con personas nuevas", "ser más resolutivo" o "ser más abierto y no tener miedo a expresar sentimientos e ideas".
A nivel profesional las experiencias en el extranjero pueden tener muchos beneficios directos e indirectos. Las personas que han tenido una experiencia de trabajo o de estudio en el extranjero identifican más frecuentemente la mejora de las habilidades en un idioma extranjero como un beneficio profesional. Además, la experiencia impacta en otros aspectos: el desarrollo de un perfil internacional, la autoconciencia, la autoconfianza y el desarrollo de competencias transversales y profesionales.
Las estancias en el extranjero presentan retos que los participantes tienen que enfrontar. Una primera barrera a superar es el idioma: mejorar la competencia en el idioma local o la comunicación con personas que no hablan el mismo idioma. La estancia en el extranjero también puede ser difícil, a veces, debido a la necesidad de adaptarse a un nuevo entorno y una nueva cultura, mientras se está lejos de los amigos y la familia. También, la propia experiencia de trabajo o estudios puede presentar nuevos retos debido a diferencias en las tareas y/o metodologías de trabajo y estudio.
Las personas que han realizado una estancia en el extranjero identifican 5 factores para el éxito de la experiencia:
- El apoyo logístico y de seguimiento por parte de las entidades de envío y las anfitrionas es importante, sobre todo en la fase de acogida.
- La actitud y disponibilidad de los anfitriones y el mentor o el tutor es muy importante porque permite identificar a la persona de referencia y de apoyo.
- Las competencias lingüísticas, en el idioma local o en inglés son importantes para sacar el máximo beneficio de la experiencia, ya sean competencias adquiridas antes o durante la estancia.
- La actitud o la personalidad son cualidades clave para una estancia en el extranjero: una mente abierta, actitud positiva, paciencia, autoconfianza, flexibilidad, adaptabilidad, la habilidad de gestionar el estrés y la habilidad para socializarse con personas nuevas.
- Una buena preparación, ya sea formación organizada o una preparación individual para poder empezar de buen pie hacia una estancia en el extranjero exitosa.
El 99% de las personas entrevistadas recomendaría una experiencia en el extranjero. Además, las personas que han tenido una experiencia en el extranjero están dispuestas a volver a hacerlo. El 95% volverían a realizar una estancia para estudiar, trabajar o hacer voluntariado en el extranjero.
El avión representa la palabra con que los entrevistados describieron su experiencia en el extranjero.
El proyecto MOB GAE ha contado con la participación de 18 entidades de 14 países: España, Italia, Portugal, Bulgaria, Reino Unido, Chipre, Malta, Rumanía, República Checa, Austria, Alemania, Francia, Eslovenia y Polonia. Para celebrar el Día de Europa, el pasado 9 de mayo, los socios del proyecto celebraron más de 12 flashmobs en diferentes ciudades europeas.
En los próximos meses el consorcio presentará los resultados de esta investigación y ofrecerá sesiones de formación a jóvenes que están preparando su experiencia académica y/o profesional en el extranjero.
Se puede consultar la información sobre las actividades del proyecto en la página web (www.mobgae.eu) o a través de Facebook (https://www.facebook.com/mobilitygae).
Esta iniciativa cuenta con el apoyo del Programa de aprendizaje permanente de la Unión Europea
