¿En qué consiste el proyecto Circuito TIC- BAE? ¿A quién va dirigido?
Cuando hablamos del Proyecto Circuito TIC- BAE nos referimos a un método de planificación del proceso de orientación que usa las nuevas tecnologías como instrumento para mejorar la empleabilidad y la búsqueda de empleo. Va dirigido a cualquier persona desempleada interesada desarrollar sus competencias profesionales.
Se trata de un protocolo de trabajo organizado en diferentes etapas en función al nivel de conocimientos informáticos y de las herramientas de búsqueda de empleo que necesita adquirir la persona. Así, la primera etapa es de alfabetización informática y el demandante de empleo la finaliza elaborando su currículum vitae de manera autónoma. Con la segunda etapa, se iniciará en el manejo de Internet y realizará un listado con empresas afines a su perfil. La tercera fase consiste en el conocimiento e inscripción en portales de empleo. Seguidamente, correspondiéndose con la cuarta etapa, los interesados obtendrán su firma digital y aprenderán a realizar gestiones a través de la administración electrónica. Y por último, en la etapa cinco, para aquellos usuarios del Servicio de Orientación que tiene bastante destreza con las nuevas tecnologías se les asesora sobre la creación de un blog profesional.
¿Cómo se integran las TIC en el proceso de búsqueda de empleo? ¿Cuáles son las herramientas básicas que utiliza el proyecto?
En el proceso de orientación profesional que se define en el proyecto, las TIC se integran de manera sistemática en todo el procedimiento. Son un instrumento imprescindible dadas las características del mercado laboral y de los canales que utilizan las empresas en la actualidad para reclutar a su personal.
Las herramientas TIC que se utilizan en el Circuito TIC- BAE son, preferentemente el manejo del ordenador, la navegación por Internet, el uso del móvil, la administración electrónica.
El proyecto consta de 5 etapas, ¿cuál de ellas representa un reto mayor para los demandantes de empleo?
De todas las etapas del proyecto la que supone un mayor reto para los demandantes es la primera, pues es la que supone un salto más cualitativo, la persona pasa del desconocimiento casi total de las herramientas informáticas hasta la motivación y el entusiasmo por aprender nuevas utilidades. Romper la barrera del miedo a utilizar las TIC es lo más difícil porque supone un cambio de actitud, se trata de decidirse a dar el paso.
¿Qué papel juegan los orientadores profesionales en el Circuito TIC-BAE?
Las orientadoras juegan un papel esencial pues son ellas las encargadas de derivar a una u otra etapa del Circuito a los demandantes de empleo en función de las necesidades que detecten a través de la entrevista personal con ellos. Además, son las responsables de impartir la formación técnica de cada una de las etapas y las encargadas de hacer el seguimiento y evaluación de todo el procedimiento.
¿Cree que es necesaria una mayor vinculación entre la orientación profesional y las TIC?
Creo que es imprescindible que la orientación profesional tenga una vinculación directa con las TIC pues vivimos en un mercado laboral invadido por las innovaciones tecnológicas. Desde el momento que la persona se queda desempleada necesita utilizar estas herramientas tecnológicas para buscar trabajo. Empezando por aprender a pedir cita en su oficina de empleo para solicitar una prestación por Internet hasta manejar un procesador de texto con el que diseñar su currículum, el enviar su candidatura a una empresa por email, hacer una entrevista de trabajo por skype o incluso buscar información sobre acciones formativas que puedan mejorar su empleabilidad. En esos momentos todo gira en torno a los avances tecnológicos y por consiguiente no puedo plantearme un proceso de orientación sin hacer uso de ellos.
Desde su punto de vista, ¿cuáles son las tendencias de futuro en cuanto a las TIC aplicadas a la orientación académica y profesional?
Las tendencias de futuro de las TIC aplicadas a la orientación académica y profesional pueden ir dirigías a desarrollar itinerarios de asesoramiento virtuales donde el demandante de empleo pueda contactar con su orientador cuando y donde lo necesite.
Desde esta misma perspectiva, la web 2.0 nos brinda un amplio abanico de dispositivos tecnológicos que junto con las redes sociales se muestran como el escenario virtual sobre el que se diseña cualquier actividad que queramos realizar, y por tanto la orientación académica y profesional debe ser uno de los directores de la obra.
Después de ganar el 3er premio Educaweb de Orientación Académica y Profesional en la categoría individual 2014, ¿qué acciones tiene previstas?
Continuar orientado a los usuarios promoviendo en ellos el espíritu de aprendizaje autónomo y el afán de superación permanente. Mi práctica orientadora seguirá basándose en mi constante búsqueda de recursos, en su difusión y en su aprovechamiento con miras a mejorar la empleabilidad de todos y cada uno de los usuarios.
