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Ciudades educadoras e inclusivas

Artículo de opinión

Este mes de noviembre se ha celebrado en Barcelona el XIII Congreso Internacional de Ciudades Educadoras. La ciudad educadora tiene como misión impulsar la educación y la integración social, abarcando todos los ámbitos y favoreciendo la cooperación entre agentes. Para celebrar este importante encuentro hemos preguntado a los expertos ¿cómo debería ser una ciudad educadora ideal? En este monográfico recopilamos sus aportaciones.


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Laia Mestres i Salud, Redacción de Educaweb
Este mes de noviembre se ha celebrado en Barcelona el XIII Congreso Internacional de Ciudades Educadoras. La ciudad educadora tiene como misión impulsar la educación y la integración social, abarcando todos los ámbitos (social, político, económico...) y favoreciendo la cooperación entre agentes (administración, empresas, profesionales de la educación, centros educativos…).
 
Para celebrar este importante encuentro hemos preguntado a los expertos ¿cómo debería ser una ciudad educadora ideal? En este monográfico recopilamos sus aportaciones.
 
El manifiesto de las Ciudades Educadoras
 
En el año 1990 se celebró el I Congreso Internacional de Ciudades Educadoras, en el que participaron representantes de ciudades de todo el mundo. A raíz de este encuentro se elaboraron los principios básicos para impulsar una ciudad desde la perspectiva educativa, recogidos en la Carta de Ciudades Educadoras. La Carta fue revisada en el III Congreso Internacional (Bolonia, 1994) y en el VIII Congreso (Génova, 2004) para adaptar sus planteamientos a los nuevos retos y necesidades sociales.
 
¿Qué es una Ciudad Educadora? Según la Carta, debe entenderse como una extensión efectiva del derecho fundamental a la educación. Debe producirse una verdadera fusión, en la etapa educativa formal y en la vida adulta, de los recursos y la potencia formativa de la ciudad con el desarrollo ordinario del sistema educativo, laboral y social.
 
Es decir, una ciudad educadora es la que es consciente de sus recursos educativos y trabaja para lograr que todos los ciudadanos accedan de forma igualitaria a la educación y la formación continua. Para lograrlo, es necesario que los gobiernos locales se impliquen para desarrollar las potencialidades educativas de la ciudad, incorporando a su proyecto político los principios de la ciudad educadora.
 
En el Estado español hay 168 ciudades asociadas a la Asociación Internacional de Ciudades Educadoras, que van desde capitales como Barcelona, Madrid, Vitoria-Gasteiz, Zaragoza o Santiago de Compostela, y municipios más pequeños como Arganda del Rey, Colmenar Viejo, El Vendrell o Mislata, entre muchos otros. A nivel internacional, además de 383 ciudades europeas, ya representantes en Asia, África y América.
 
Además del Congreso Internacional, las ciudades educadoras se comprometen a llevar a cabo los puntos recogidos en la Carta y a impulsar buenas prácticas educativas elacionadas con la inclusión social y la igualdad de oportunidades, la cultura como factor de desarrollo, el voluntariado como contribución a la mejora de la ciudad, etc.
 
¿Cómo debería ser una ciudad educadora?
 
1.- Inclusiva:
 
La inclusión y la participación ciudadana han sido los ejes centrales del Congreso de este año. Los participantes se han encargado de promover el debate crítico sobre el papel de la ciudad en la promoción integral de la inclusión educativa.
 
Una de las principales conclusiones del encuentro es que la exclusión tiene múltiples dimensiones (social, económica, política, social, cultural, generacional…) y que una ciudad, cuando se deja llevar por los dictados del mercado, acaba siendo un espacio de creciente desigualdad y exclusión social. La clave es convertir la ciudad en proveedora potencial de recursos convivenciales, sociales y democráticos para promover la inclusión.
 
La Ciudad Educadora ideal potencia y genera políticas de participación ciudadana, de trabajo y colaboración entre todos los agentes sociales y educativos que las configuran, sabe dar relevancia democrática a sus acciones y puede fortalecer la acción cívica, la inclusión social y la riqueza económica de su entorno. Precisamente, en este sentido se manifiesta Eva Segura, Jefa de Estudios de Primaria de la Escola Garbí Pere Vergés, quien considera que la ciudad educadora es una ciudad abierta al mundo, abierta al futuro. Una ciudad con energía, ganas e ilusión para acompañar en el proceso madurativo de cada individuo dotándolo del máximo de experiencias culturales, de formación y desarrollo personal.
 
2.- Con oferta educativa de calidad
 
Otro aspecto clave de las Ciudades Educadoras es la necesidad de ofrecer una oferta educativa de calidad, ya sea del ámbito formal o no formal, y que abarque toda la trayectoria vital. Para los organizadores del congreso, la escuela juega un rol central por ser, a la vez, una fuente de conocimiento y de desarrollo de competencias personales necesarias para la vida y un laboratorio activo de diversidad social y cultural que permite formar a una ciudadanía responsable, crítica y colaborativa. Carme Segura, adjunta a la dirección del Congreso Internacional, opina que las personas que reciben conocimientos a lo largo de toda la vida acaban desarrollando el propio potencial humano de expresión y afirmación, son personas participativas y críticas y aportarán sentido al concepto de asociación.
 
3.- Con administraciones públicas locales implicadas
 
Las administraciones públicas locales tienen un papel destacado en la articulación de políticas inclusivas y transversales. Si se suma la iniciativa ciudadana al esfuerzo municipal se pueden movilizar los recursos de la ciudad, crear redes de colaboración y fomentar una ciudadanía activa y con valores como la solidaridad y el compromiso.
 
4.- Proactiva y con voluntad de mejora continua
 
Las ciudades participantes en el congreso se han comprometido a llevar a cabo políticas proactivas y preventivas para favorecer la inclusión, con propuestas concretas; atendiendo a los colectivos vulnerables; proveyendo a la sociedad de los recursos adecuados y fomentando el empoderamiento cívico.
 
5.- En lucha contra el fracaso escolar
 
Las Ciudades Educadoras buscan fomentar el éxito educativo de toda la ciudadanía, a la vez que se trabaja para la mejora del sistema educativo, promoviendo programas y acciones para mejorar el éxito escolar. Estas acciones deben empezar en la formación obligatoria, pero desarrollarse a lo largo de toda la vida, creando estrategias de desarrollo de competencias.
 
Pere Monràs, de Sangakoo, Maths for life, considera que la educación es la clave y el motor de la cultura, el pensamiento y la creatividad que necesitamos individual y colectivamente. Está en la propia sociedad (no en los estados), sociedad que configurada como ecosistema facilitador no estrangula el sentir humano. Hoy día el 50% de la humanidad vive en ciudades que hemos diseñado para trabajar más que para vivir.
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