Encuentra tu curso ideal

9%

¿Qué quieres estudiar?

TIC y enseñanza: la importancia de la planificación estratégica

Artículo de opinión


  • Deja tu comentario
  • Valora


Javier Rodríguez Ten, Director del Máster Internacional en Derecho y Gestión deportiva ISDE - IUSPORT (Madrid)
La incorporación de las TIC en la enseñanza es un fenómeno imparable, en el que tanto la velocidad de implantación como la evolución de las herramientas disponibles se incrementadiariamente. Su generalización conlleva una disponibilidad casi inmediata, toda vez que gran parte de ellas son accesibles en la red de manera gratuita, sin perjuicio de contenidos adicionales que exigen ya un desembolso económico variable, atendiendo a la naturaleza del usuario, el alcance y la finalidad.

En este complejo y amplio mundo tecnológico y docente, la planificación y la coordinación son elementos imprescindibles que pueden determinar el éxito o el fracaso del empleo de las TIC en la enseñanza, no tanto a corto sino más bien a medio plazo. Queda clara ya mi apuesta por la incorporación estratégica frente a la improvisación, que puede aportar beneficios inicialmente pero que pronto genera problemas de descoordinación, incompatibilidades operativas, adopción precipitada de decisiones cuyos efectos se mantendrán en el tiempo, etc.

En cualquier caso, creo que la implantación estratégica del uso docente de las TIC puede ser más sencilla y rápida en la enseñanza privada que en la pública. En el campo privado porque existe una mayor autonomía y el coste puede ser asumido o repercutido de diferentes maneras, mientras que en el ámbito público se exigen procedimientos complejos de autorización, habilitación presupuestaria que no siempre es posible, adjudicación de recursos mediante concurso, etc. De manera adicional, resulta más fácil implantar la metodología TIC en programas específicos (cursos, Másteres) que en el proceso educativo, puesto que que su autonomía (ausencia de relación con contenidos o metodologías de cursos anteriores y/o posteriores) lo permite, salvo el supuesto de centros o entidades de nueva creación y/o enseñanzas que comienzan a impartirse (por ejemplo, un nuevo grado en una Universidad); en estos casos, puede asumirse desde un principio el uso de las TIC como elemento innovador o distintivo, incluso seleccionar al profesorado a partir de dicha premisa.

En el ámbito de la enseñanza pública seguro que existen ejemplos donde la incorporación de las TIC a nivel estratégico ya se está produciendo. Sin embargo, mi experiencia personal es exclusiva del ámbito privado, y sobre ella ejemplificaré.

En primer lugar he de mencionar la Universidad San Jorge de Zaragoza (USJ), una institución joven cuyo reconocimiento data de 2005. La USJ apostó desde un principio por la innovación tecnológica, y articula toda la enseñanza a través de las TIC, mediante una plataforma docente virtual disponible on line en la que se insertan materiales en diferentes formatos (documentos, vídeos, presentaciones powerpoint, enlaces web, etc.), mediante la cual se materializan tutorías y consultas rompiendo la rigidez de presencialidad y horarios, se realizan pruebas y exámenes, se facilitan las calificaciones, etc. Profesores y alumnos disponen de un ordenador portátil facilitado por la Universidad, el Campus cuenta con wi-fi, las clases están preparadas para que alumnos y profesores conecten su portátil y se proyecten en las mismas los contenidos digitales mediante cañones de proyección, etc. Toda una apuesta estratégica por las TIC que, sin duda, representa un elemento diferenciador y que facilita la incorporación de nuevas herramientas o aplicaciones de una manera rápida y sencilla.

En segundo lugar, he de referirme al Instituto Superior de Derecho y Economía (ISDE), prestigiosa institución reconocida nacional e internacionalmente que oferta numerosos programas de postgrado, no oficiales, en el área jurídica y económica. Se trata de otro ejemplo destacado de institución que promueve y refuerza la simbiosis educativo-tecnológica desde un punto de vista estratégico. Con independencia de contar con programas presenciales, ISDE tiene diferentes Másteres cuya metodología o formato es semipresencial e incluso completamente a distancia (e-learning), en los que se encuentran matriculados alumnos de países de todo el mundo, en especial de Europa e Iberoamérica. Las necesidades que surgieron con la globalización de la oferta formativa implicaron el salto tecnológico, y de este modo se procedió hace ya tiempo a incorporar las TIC a nivel estratégico, de manera similar a como hemos apuntado anteriormente: empleo de plataformas docentes virtuales que permiten la interacción remota e inmediata,en las que se ponen a disposición de los alumnos los materiales en diferentes formatos; incorporación paulatina de las sesiones formativas en vídeo o podcast; resolución de consultas y tutorías por e-mail o videollamada; habilitación de encuentros en directo vía forossincrónicos o videoconferencia múltiple;realización de pruebas y comunicación de calificaciones con su correspondiente feedback, etc.

Las TIC no sólo admiten su uso por el profesor, sino también la interacción con el alumno, otros compañeros y terceros interesados en la materia, sea de forma autodidacta (mediante los tutoriales o la información disponible en la red) o preferiblemente mediante cursos ad hoc (por ejemplo, el de competencias TIC para profesores que organiza la Fundación UNED, dirigido por Meritxell Viñas). De una o de otra forma todos podemos descubrir y aprovechar no sólo determinados recursos web, sino herramientas como google y sus aplicaciones adyacentes, symbaloo, scoop.it, evernote, feedly o jing (para muchos de nosotros desconocidos hasta hace muy poco); incluso facebook y twitter están siendo objeto de aprovechamiento docente. Algo más lejos quedan (aún) opciones como la realidad aumentada, con unas exigencias tecnológicas mayores, pero ya llegarán.

Ciertamente, cuando un profesor tiene total y completo dominio sobre el programa y las materias a impartir, la improvisación puede resultar útil y admisible, toda vez que se tratará de una implantación dirigida y unívoca, sin interferencias ni ambigüedades. Él decide qué usa y cómo lo usa, establece las reglas y los límites, facilita a los alumnos los conocimientos necesarios (calculando el tiempo preciso) y pone fin al uso de la herramienta cuando lo considera oportuno. Estamos hablando, por ejemplo, de un curso específico de duración temporal, impartido por un profesor o un equipo muy reducido de docentes. Que sin embargo, para ulteriores ediciones valorarán las "lecciones aprendidas" que aplicarán estratégicamente para mejorarlo.

Sin embargo, la realidad común de la docencia es otra. En el campo de la enseñanza oficial o reglada existe un largo itinerario formativo, multidisciplinar, que se desarrolla simultáneamente en diferentes áreas que imparten diferentes profesores, y en el que es previsible uno o varios cambios de centro (ESO, bachillerato, Universidad…). Esta heterogeneidad obliga a una adecuada planificación o coordinación por parte de los responsables educativos, que debieran ir interesándose ya por las TIC con carácter preferente. En un primer momento debe implicar, al menos, la elección (con visos de estabilidad, palabra que en la educación española parece estar proscrita) de las herramientas a emplear, para posibilitar la interacción y homogeneización entre los centros, de igual y diferente nivel de enseñanza. Esta decisión exige previamente un análisis de las capacidades que ofrecen las distintas alternativas, su sencillez y accesibilidad, su coste económico directo (licencias) y estructural (medios necesarios para su uso eficaz) y calendario de implantación. Una actuación de esta entidad sólo se justifica desde una perspectiva estratégica a nivel global, y la transferencia de la competencia de educación a las Comunidades Autónomas representa ya un obstáculo para una verdadera planificación estratégica nacional. Habrá Autonomías TIC ricas y pobres.

En tanto esto no acontezca, el centro de enseñanza es el ámbito en el que se debe diseñar estratégicamente el aprovechamiento de las TIC. El planteamiento ha de ser similar, aunque referido a los niveles educativos y materias que se imparten en el mismo. Si en una asignatura que se cursa durante varios años, unos profesores utilizan unas herramientas TIC pero otros recurren a alternativas similares y además existen otros que no las implantan, el desconcierto para el alumno será importante, ya que al cambiar de curso o de grupo deberá familiarizarse con diferentes aplicaciones (que representan horas de aprendizaje), e incluso puede tener problemas de incompatibilidad de uso y fragmentación de recursos, perdiendo o desaprovechando parte de su información. De manera añadida, la coordinación entre docentes será más difícil, dado que la posible interacción tecnológica se verá dificultada o limitada, repercutiendo negativamente en la eficacia y agilidad que se pretende con las TIC a nivel de departamento pero también de centro. Una posibilidad es instaurar el "coordinador TIC" en cada centro de enseñanza, seguida de la designación de "coordinadores TIC" en los departamentos, formando la "Comisión TIC" del centro. Hasta entonces, los profesores iniciados puedan jugar el rol de pioneros e impulsar el interés por la materia de compañeros y alumnos a través del uso aislado o puntual, pero la generalización exige coordinación e impulso directivo.

Como breve reflexión o conclusión, creo que la improvisación en el uso de las TIC puede ser un punto inicial o de partida, casi experimental, pero que pasar de contar conalgunos profesores innovadoreso pioneros a disponer de una metodología TIC generalizada, de departamento o de centro, exige una adecuada planificación estratégica que garantice su completa eficacia(sin perder posibles capacidades ni generar distorsiones ni exclusiones) y que permita un aprovechamiento óptimo y eficiente, coordinado y en continua actualización, de todas las posibilidades y alternativas. Esa es su aportación.
Deja tu comentario