La consultora de recursos humanos Adecco ha elaborado el informe "Futuros empleos: cómo trabajaremos en la Europa del Futuro" en el que analiza la situación del mercado laboral, las oportunidades y retos de futuro y los pasos necesarios para encontrar empleo.La principal conclusión que puede extraerse es que los trabajadores del futuro deberán tener más flexibilidad debido a que ya no puede considerarse que un empleo equivalga a seguridad y a una carrera lineal y ascendente. El nuevo escenario social propicia que las vidas laborales sean cada vez más particulares y menos estándar, favoreciendo situaciones de discontinuidad laboral, ruptura y nuevos comienzos.
Otro aspecto fundamental del análisis de Adecco es la movilidad internacional. La globalización, especialmente vinculada a la externalización de grandes empresas, provoca que la búsqueda de empleo y el reclutamiento sean cada vez más internacionales. En este punto juega un papel determinante la formación continua, adaptada a las necesidades mundiales, y el dominio de idiomas, especialmente del inglés que permite abrir puertas en la mayoría de países.
En la línea de las capacidades del candidato/a, se observa un impulso de las competencias transversales: además de una adecuada cualificación profesional y de una cierta flexibilidad, los trabajadores deberán tener capacidad de adaptación al cambio. Además, habilidades como una buena comunicación o la gestión de conflictos facilitan, ya actualmente, que un candidato pueda encontrar trabajo más rápidamente que otro con el mismo nivel de formación reglada.
El informe también analiza cómo será el mercado laboral en 2020 y destaca que la brecha entre la oferta y la demanda aumentará, especialmente entre los sectores de población con formación más baja. Así, los expertos estiman que las actividades que demandan sólo cualificaciones medias serán mayoritariamente automatizadas, dejando obsoleta la formación de muchos trabajadores. En cambio, los empleados más cualificados se verán beneficiados por la introducción de las TIC. Ante esta situación, la recomendación unánime es formarse, mantener los conocimientos actualizados y adquirir las competencias adecuadas para el puesto a desempeñar.
Por último, el estudio de Adecco destaca que la singularidad será el factor competitivo clave en un entorno en constante movimiento. En este sentido, la orientación y el autoconocimiento son decisivos para que el trabajador pueda optimizar los recursos y reorientar sus pasos en función de las necesidades. La educación y formación son básicas, pero también el trabajador deberá poseer importantes características personales para desarrollar su carrera profesional: resiliencia para hacer frente a las dificultades en épocas de incertidumbre; tolerancia frente a la ambigüedad y capacidad de interrelación.
