La capacitación y las competencias de los profesionales de la orientación académica y profesional es un tema que preocupa a los expertos del sector. Actualmente, existen diferencias a nivel internacional en cuanto a la definición del rol del orientador y sus funciones y en su formación básica y permanente. Por eso, cuando DEP Instituto, gabinete de estudios de Educaweb, la tuvo la oportunidad de participar en un proyecto europeo de validación de competencias en el marco de la orientación, consideró que era fundamental su implicación en esta iniciativa.IMPROVE es un proyecto internacional cofinanciado por la Comisión Europea dentro del Programa del Aprendizaje Permanente, Grundtvig. El proyecto IMPROVE tiene el objetivo de desarrollar y poner a prueba directrices para el reconocimiento de competencias en los orientadores profesionales. Hasta el momento, el proyecto ha generado un Estudio sobre los marcos existentes para la validación de competencias de los orientadores profesionales, redactado las Directrices IMPROVE para la validación de competencias de personas en el puesto de trabajo y se ha realizado una prueba piloto, en la cual han participado 140 profesionales de los países colaboradores del proyecto (España, Italia, Alemania, Rumania, Grecia y República Checa).
De todos los entrevistados, un 25,4% de los profesionales orienta a jóvenes, un 29,4% trabaja con adultos, y 45,2% con los dos colectivos. En el caso de la experiencia realizada en España, se ha contado con más de 20 participantes provenientes de diferentes Comunidades Autónomas.
En la prueba piloto participaron profesionales que dinamizan entrevistas de orientación profesional (independientemente de sus títulos, experiencia o itinerarios formativos), que se animaron a participar en un análisis de su actividad profesional con la ayuda de un evaluador.
La prueba piloto consistía en la realización de entrevistas de evaluación con un cuestionario estructurado, utilizando el programa de videoconferencias Skype. La finalidad de la entrevista era medir sus competencias, identificar sus áreas de fortaleza y los aspectos que requieren una mejora. Además, el proceso permitió al participante a poner en marcha un plan de acción para la mejora o el mantenimiento de las competencias.
Los evaluadores que realizaron las entrevistas son orientadores experimentados y trabajadores del sector en activo. Su misión durante el proceso de evaluación, además de facilitar al participante información adicional y verificar las cuestiones técnicas, fue realizar un proceso de retorno de sus observaciones sobre los resultados y facilitar al participante a la elaboración un plan para la mejora de competencias o de su mantenimiento.
Primeras valoraciones de la prueba piloto de IMPROVE
Aunque los socios participantes en el proyecto todavía se encuentran en el proceso de elaboración de las conclusiones concretas sobre la iniciativa, los datos recopilados hasta el momento nos muestran que los participantes valoran el proceso como una experiencia de aprendizaje. En concreto, la mayor parte (21,7% mucho, 46,2 bastante) de los participantes respondieron que durante la evaluación aprendieron sobre sus fortalezas y los aspectos que podrían mejorar. Sólo un 8,5% respondió que no aprendió nada nuevo. En cuanto a la valoración general de IMPROVE, un 89,4% de los participantes valoró la experiencia como excelente (40,4%) o buena (49,0%).
Según los participantes, un 79,1% cree que la evaluación puede discriminar (completamente 24,8% o bastante 54,3%) entre orientadores competentes y no competentes en la realización de entrevistas de orientación profesional.
En cuanto a la opinión de las evaluadoras, Cristina Caldas, orientadora de Educaweb, considera que "experiencias así son esenciales y más que necesarias para determinar las competencias de los orientadores hoy en día, figura imprescindible en el contexto socio-económico actual". Desde su punto de vista, se ha tratado de una provechosa actividad, que le ha permitido compartir inquietudes y experiencias con otros profesionales de la orientación.
Para Neus Bosch, orientadora de Educaweb, la evaluación de competencias en orientación es un "aspecto fundamental, ya que, es conveniente conocerse bien uno mismo y saber los puntos fuertes y los puntos débiles para poder mejorar. Sin una evaluación resulta difícil la mejora como profesional."
Las evaluadoras coinciden en destacar que los resultados de las entrevistas han sido en su mayoría "muy buenos y satisfactorios", ya que los participantes disponían de gran parte de las competencias adquiridas y las aplicaban en su actividad diaria. Sin embargo, se observa que "algunos de los entrevistados obtenían peores puntuaciones en aquellas preguntas que hacían referencia a las teorías sobre las que sustentaban sus procesos de orientación", por eso, consideran que "deben mejorar en el conocimiento de estas teorías y algunos entrevistados su formación continua".
Actualmente, los miembros del consorcio de IMPROVE están reflexionando sobre los resultados de la prueba piloto y sus implicaciones para los próximos pasos del proyecto. Con el feedback de los participantes y evaluadores se modificaran el cuestionario de evaluación y el proceso del control profesional en general. Se puede consultar más información sobre el proyecto IMPROVE y sus actividades en http://www.improveguidance.eu.
