Desde el punto de vista de la educación y según se puede analizar en la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de educación, la orientación personal y profesional así como la motivación del alumnado, esta presente en dicha ley.
Fijándonos en el Capitulo I, Artículo 1 destaca entre otros los siguientes principios de la educación:
- La orientación educativa y profesional de los estudiantes, como medio necesario para el logro de una formación personalizada, que propicie una educación integral en conocimientos, destrezas y valores.
- El esfuerzo individual y la motivación del alumnado.
- Y en el Titulo III, Artículo 91 destaca como funciones del profesorado entre otras: La orientación educativa, académica y profesional de los alumnos, en colaboración en su caso, con los servicios o departamentos especializados.
En la actualidad, debido a los cambios que han sufrido distintas familias, (ya sean divorcios, separaciones,…), se observa como algunos de los hijos de padres con un menor nivel cultural, ven truncados sus posibilidades de estudio, ya que en muchos casos, los padres (ya sea la madre o el padre) debe disponer de su tiempo para poder trabajar y hacer frente a otro tipo de obligaciones dejando a un lado el ámbito educativo. Por ello, desde la escuela, debería existir una mayor información, tanto para los padres y madres, así como también para el alumnado en general y poder lograr un mayor conocimiento sobre dicho tema y una mayor motivación por parte del alumnado y conseguir un mayor esfuerzo en cuanto a trabajo diario en clase en las distintas áreas, las tareas para casa, el estudio diario de los nuevos contenidos…
Desde la escuela, a diario, observamos que hoy en día existen alumnos/as que no tienen vocación o sus aspiraciones para el futuro no son muy altas. Desde casa, sus padres se conforman con que sus hijos sigan con el trabajo que esta desempeñando el padre o bien seguir en el seno familiar.
Y para finalizar, esperemos que con todos estos cambios que se avecinan, exista un mayor compromiso por parte de todos/as y empecemos a tener un mayor autoconocimiento de nosotros mismos y poder conseguir una mayor motivación de nuestros alumnos/as y seguir el consejo de William Shakespeare: "De todos los conocimientos posibles, el más sabio y útil es conocerse a sí mismo".