Cuando publicamos el primer monográfico sobre conciliación de la vida personal y laboral, en 2009, nos planteábamos si la conciliación era una de las asignaturas pendientes de los trabajadores, empresas, administración pública… Por supuesto, en estos dos años no se han producido avances significativos, pero podemos comprobar que existen buenas prácticas de empresas estatales y comparar las medidas de conciliación que se adoptan en otros países de la Unión Europea.Todavía queda un largo camino por recorrer para lograr las mejores condiciones que ayuden a conciliar vida laboral y familiar, aunque cada vez se dispone de más estrategias que favorecen el equilibrio entre trabajo y vida propia, y estudios que analizan las acciones que pueden llevarse a cabo desde el punto de vista empresarial e individual para mejorar esta situación.
En el monográfico 241 sobre conciliación de la vida personal y laboral nos hemos querido centrar en cómo la tecnología puede ayudar a compaginar el trabajo con el resto de actividades personales y familiares.
Medidas para conciliar: la flexibilidad
La conciliación hace referencia a acciones sociales, institucionales y empresariales relacionadas con la forma de repartir el tiempo de trabajo. Las políticas de conciliación se concretan en medidas que favorecen la compatibilización del tiempo dedicado al empleo y a la vida personal y familiar, y a la vez, van dirigidas a mejorar la calidad de vida de mujeres y hombres.
Conciliar no supone trabajar menos, sino organizar el tiempo de trabajo de manera distinta, facilitando responder con éxito a todas las responsabilidades.
Algunas empresas han empezado a aplicar medidas que favorecen una mejor conciliación entre trabajo y vida personal. Se trata de estrategias relacionadas básicamente con la flexibilización del tiempo. En este caso, los expertos recomiendan propiciar un horario de 9 a 17 sin reuniones que se alarguen en exceso por la tarde, realizar jornada intensiva los viernes, permitir la flexibilidad a la hora de entrar y salir y fomentar el teletrabajo ocasional en los casos que pudiese realizarse.
La flexibilidad es fundamental. Nuria Chinchilla, directora del Centro Internacional Trabajo y Familia de IESE apunta en el informe Diez años de conciliación en España que existen 5 líneas de actuación en cuanto a buenas prácticas de flexibilidad en el trabajo: 1.- Medidas de flexibilidad dentro de la jornada laboral; 2.- Medidas de flexibilidad durante la trayectoria profesional; 3.- Flexibilidad en el lugar de trabajo; 4.- Servicios de apoyo al empleado; 5.- Políticas de formación y desarrollo.
De hecho, la flexibilidad parece el camino a seguir ya que, según un estudio de doctor Jospeh G. Grzywacz, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Wake Forest y autor de una investigación publicada en 2007 en "The Journal of Occupational and Environmental Medicine", "Las personas que tienen más flexibilidad en sus empresas, tanto de horarios como de lugar de trabajo, y que así lo perciben, llevan una vida más saludable que aquellos que tienen trabajos más rígidos". El estudio mostraba que los empleados en una empresa flexible tenían hábitos más saludables al disponer de una mejor organización del tiempo, como dormir un mínimo de 7 horas diarias o hacer ejercicio.
Y no sólo supone una ventaja para el trabajador, según un estudio realizado por la consultoría Regus y publicado en marzo de 2011, el 73% de las empresas encuestadas cree que el trabajo flexible genera menos costes, un 80% reconoce que la conciliación de la vida laboral y personal ha hecho aumentar la satisfacción y la motivación y más del 50% opina que el trabajo flexible aumenta la productividad del personal.
¿El Teletrabajo y el e-learning pueden mejorar la conciliación de la vida familiar y laboral?
Algunos de los aspectos que pueden contribuir a la flexibilización y a mejorar la conciliación de la vida personal y laboral son el e-learning y el teletrabajo. En ambos casos, las TIC son fundamentales para que el trabajador pueda realizar sus tareas de la misma forma que si estuviese en su puesto y para coordinarse con la empresa.
El teletrabajo consiste en trabajar en un lugar diferente a la oficina, contando con el apoyo de las nuevas tecnologías que permiten la comunicación y el acceso a los programas y aplicativos en la distancia. Además de poder trabajar desde cualquier lugar, el teletrabajo favorece la flexibilidad horaria, facilitando la conciliación.
Teletrabajar tiene sus ventajas y desventajas. Para la empresa supone una reducción de los gastos de espacio, luz, equipamientos e infraestructuras, propicia la posibilidad de contratar a expertos que residen en otras regiones, potencia el uso de las TIC… en cuanto a las desventajas, supone un cambio en la organización y una pérdida del control del personal.
En este sentido, Carlos Brenes, responsable del Área de cursos Online del IED Madrid y Director del Festival de Creación Digital Wasabi in Motion, considera que el régimen de teletrabajo es una manera de responder a la responsabilidad con más responsabilidad. La confianza que se deposita en el trabajador que está en su casa, se convierte en confianza hacia la empresa y en una mayor lealtad. Si los empleados están a gusto se implican más con la organización.
Para el trabajador, además de la flexibilidad de horario y las facilidades para conciliar, el teletrabajo le supone un ahorro en desplazamientos (y en consecuencia una reducción del estrés por atascos, retrasos en el transporte público, etc.), favorece el acceso al trabajo en igualdad de condiciones de personas con minusvalías, etc. Las desventajas están relacionadas con la propia gestión del tiempo: debe ser igual de productivo que en la oficina y para ello es necesario organizarse bien. Además, pierde el contacto del día a día con los compañeros y jefes. Para Carlos Brenes, es cierto que existe el riesgo de no saber separar la vida laboral de la personal pero al final siempre es una cuestión de saber establecer un orden de prioridades, ser responsable y tener un esquema claro. Hay que saber organizar el tiempo, así como utilizar bien los recursos y responder a la confianza depositada con esfuerzo y constancia.
En cuanto al e-learning, podemos afirmar que es la modalidad de formación continua que permite una mejor conciliación de la vida personal y laboral. Los expertos reconocen que estudiar a distancia favorece la autonomía y la autogestión del tiempo y/o espacio a lo largo del proceso de aprendizaje.
En anteriores monográficos hemos hablado de forma extensa de las ventajas del e-learning, pero hay que tener en cuenta que este tipo de formación continua en el entorno laboral debe ser personalizable, ya que aprender de forma autónoma exige altas dosis de disciplina y dedicación por parte del alumnado. El éxito de una acción formativa basada en el e-learning debe tener en cuenta que el trabajador se encuentra condicionado por circunstancias profesionales, personales y familiares que influyen directamente sobre su comportamiento. Por tanto, las estrategias de aprendizaje deben considerar estas particularidades para poder reaccionar en función de las necesidades de los alumnos.
Las organizaciones deben profundizar en nuevas vías que permitan la conciliación de la vida laboral y personal, y el e-learning convenientemente gestionado puede convertirse en una solución formativa adecuada. La construcción de un proyecto formativo en la modalidad de e-learning se debe apoyar sobre características como la flexibilidad, tan necesaria a la hora de complementar la formación con las obligaciones profesionales y familiares. En cuanto al teletrabajo, como hemos visto anteriormente, es necesario, además de la tecnología adecuada, un compromiso por parte del trabajador y la empresa que se base en la confianza y en la organización correcta de las tareas a desempeñar.
Webgrafía:
- http://javiermalagon.com/2011/03/07/diez-anos-de-conciliacion-en-espana/
- http://www.mujeresycia.com/?x=nota/43011/1/medidas-de-trabajo-flexibles-para-aumentar-la-productividad
