Así, el capital intelectual y la gestión del conocimiento adquieren importancia, ya que se constituyen en un instrumento para afrontar los cambios que esta economía exige. La tendencia de las empresas es a contar con una estructura que permita estimular la comunicación y con una actitud abierta al cambio, para influir y facilitar la asimilación tecnológica. Esto hace que se replanteen también las funciones empresariales y que aparezcan nuevas formas de organización que permitan un flujo inmediato de conocimientos relacionados con el negocio.
Aspectos conceptuales de la Gestión del Conocimiento
En el estudio de la gestión del conocimiento "Knowledge Management", el objeto es el conocimiento, y el objetivo está relacionado con el proceso de identificación, medición y aprovechamiento de recursos intangibles de que dispone una organización, a fin de apoyar la estrategia empresarial. Se puede decir, que la gestión del conocimiento consiste en el proceso de generación (creación y adquisición de conocimiento), de estructuración (acumulación y organización del conocimiento para ponerlo a disposición de los interesados), de transmisión e intercambio de conocimientos sin restricciones en tiempo real, y su posterior aplicación. Este conocimiento requiere renovación y mejora continua en forma de aprendizaje. Una vez asimilado el proceso de aprendizaje, es necesario transformar este conocimiento y difundirlo para evitar que se desaproveche. Esto representa el paso de un conocimiento individual a uno colectivo, por el hecho de reutilizar los conocimientos y la experiencia de los que participan en el proceso.
La Gestión del conocimiento abarca una serie de conceptos que conviene estudiar para entender para aclarar su significado. Se parte de las bases teóricas y sus representantes más destacados que han profundizado en temas tales como: la información, el conocimiento, el aprendizaje y la innovación.
- La información:
Los productos de las TIC son los instrumentos que permiten visualizar, tratar, almacenar y transmitir la información por los medios electrónicos. Las TIC afectan a las actividades de información dentro de la empresa y a las actividades que requieran producción e intercambio de información de servicios de información, además, implica el desplazamiento de las tecnologías existentes y la incertidumbre por el cambio, aunque esto dependerá del grado de oferta y demanda de estos servicios de información. El factor determinante no es solamente, ni la reorganización única, ni la informatización aislada, pero si la combinación de las dos. (J. Metacalfe, 1985; Lombard, 2001).
La industria de las tecnologías de la información se constituye en el elemento primordial dinamizador y de mayor efecto multiplicador de la economía, y la capacidad de innovación es la que determina el posicionamiento de empresas, regiones y países en esta industria globalizada, se requiere de flexibilidad empresarial, apertura institucional y un entorno social informado y abierto a la información (Castells, 1999).
- El conocimiento
Dentro de las aportaciones al estudio del conocimiento están las que se centran en la tarea del entendimiento y aprovechamiento de los recursos como es la Teoría de los recursos (Barney 2004; Wernerfelt 1984), o la Teoría de las capacidades dinámicas; las cuales estudian los recursos y los procesos, y especialmente el conocimiento como un recurso para alcanzar los objetivos de la organización. Se habla además, de la importancia de la empresa de centrarse en los recursos intangibles, a la profesionalización creciente de los trabajadores. La Teoría del Conocimiento, básicamente referida al estudio de las empresas desde el punto de vista de los conocimientos que poseen. Esta teoría se basa en las contribuciones teóricas acerca del conocimiento de Penrose, Arrow, y Hayek. A partir de éstas aparecido otras como la economía evolutiva, de Nelson y Winter, la epistemológica de Polanyi; y otros relacionados con el conocimiento tácito y explícito, la transferencia de conocimiento. Otras teorías como la del capital humano, dan importancia a las personas y al comportamiento humano y sus interacciones; esto es, el conocimiento y las habilidades de las personas, gracias a la formación del trabajador como una forma de incrementar la productividad.
En cuanto al conocimiento tácito y explícito, tiene la capacidad de ser renovado en forma de aprendizaje. El conocimiento explícito es el que se estructura en la mente de las personas, se materializa y se pone a disposición en revistas, libros, etc. Es procesado y difundido a través de redes de personas o de las TIC (electrónicamente o almacenado en bases de datos). Y el conocimiento implícito o tácito (de naturaleza subjetiva e intuitiva) es aquel que poseen las personas a través de su experiencia personal (vivencias personales, ideales, valores, emociones), y que puede ser utilizado por otros (Brooking 1997; Davenport, 1998; Nonaka y Takeouchi, 1995).
El conocimiento es pues, un elemento más dentro de la empresa al cual hay que tratar como un proceso más. En este proceso interviene, en un primer momento, la información, las tecnologías de la información y de las comunicaciones para hacer más eficiente el trabajo, del puesto de trabajo y del trabajo en equipo desde cualquier lugar. Por otro lado, se trata de hacer eficientes los procesos; es decir, mejorarlos hasta adquirir aprendizaje, desde la adquisición de conocimientos, habilidades y actitudes de las personas, formal o informal; reflexionar, probar ideas aunque sea a pequeña escala y tomar decisiones, se manifiesta a nivel individual en mejoras en el salario y en oportunidades de empleo, y en la actualización de conocimientos.
- Aprendizaje e innovación
Para llevar a cabo el proceso de Gestión del Conocimiento se requiere de herramientas o instrumentos que funcionen como un sistema para administrar la información y el conocimiento, y que el proceso sea liderado y gestionado estratégicamente; de tal manera, que se refleje en el aumento y diferenciación del capital intelectual, en el aumento de la capacidad estratégica del empleado, en el aprendizaje continuo, en la toma de decisiones acertadas; y consecuentemente en la productividad y la competitividad de la empresa.
Referencias
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