Más allá del impacto comunicativo que aporta la presentación de un estudio de estas características, el hecho que la universidad empiece a rendir cuentas ya es una señal positiva.
Por ejemplo. Tenía constancia que había un 40% de los estudiantes de primer curso que no finalizaban los estudios universitarios en los que se habían matriculado. Ahora sabemos que un 79% de los estudiantes que ingresaron en el sistema de educación superior obtuvieron un título universitario, 9 puntos por encima de la media de la OCDE.
Otro ejemplo sería la constatación que las universidades del Estado han multiplicado por tres los recursos obtenidos en concepto de I+D+i, creciendo un 50% más que el PIB.
Por lo tanto, bien por tener cada vez más y mejores datos del sistema universitario.
El siguiente paso, a mi entender, es explicar más y mejor las decisiones políticas y presupuestarias relacionadas con estos datos.
Sigamos los mismos ejemplos. Que un 21% de los universitarios de primer curso no finalicen ninguna carrera, ¿se considera positivo o negativo? ¿Se trata de ser más exigentes y seleccionar mejor quien tiene el derecho de ser un graduado o postgraduado universitario o de facilitar que más gente acceda a este tipo de títulos? Las decisiones pueden ser completamente distintas y las consecuencias exactamente igual.
Por otro, lado, hemos dicho que el crecimiento de los recursos de innovación captados por la universidad es positivo, probablemente. Sin embargo, si la inversión global del país en I+D+i ha bajado, ¿de donde han salido los euros dedicados a la universidad? ¿De la financiación pública? ¿En cuanto han aumentado los ingresos por transferencia tecnológica o de conocimiento a la sociedad? ¿Cuál es el impacto económico de la inversión pública en I+D+i en las universidades públicas?
Repito: Avancemos al máximo en la obtención de datos, por supuesto. Pero empecemos a relacionar las decisiones políticas con algunos indicadores que nuestros responsables políticos y universitarios se marquen como objetivos a cumplir.
No sólo es cuestión de reflexionar más sobre la universidad, sino de tomar decisiones adecuadas sobre los datos obtenidos.
Enric Renau
Editor