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Colectivos que tienen dificultades de inserción o de adaptación a nuestro sistema educativo y socio-laboral
Artículo de opinión
Pero pregunto, ¿por qué se espera hasta esa oportunidad pedagógica para proponer formas de aprendizaje más próximas a la realidad del alumno y no se efectúa durante la escolarización obligatoria? Igualmente cabe reflexionar sobre los contenidos básicos que desarrollan las enseñanzas obligatorias.
Según estudios universitarios realizados con esmero, el fracaso escolar se ha enquistado en Europa tras unos años anteriores de ciertas mejoras por el hecho que en esos programas se pretende que en unos pocos cursos académicos, en instituciones poco consolidadas, con recursos escasos y con profesionales jóvenes y mal pagados que resuelvan lo que en los centros de secundaria no han conseguido. Por otra parte la titulación obtenida no equivale al de la Formación Profesional; y por si fuera poco, hay constancia de que en el mercado de trabajo ese paso por este tipo de programas puede ser incluso negativo de cara al empleo existiendo hasta una tesis doctoral, a la que se puede remitir, que demuestra que un fracaso escolar tiene más posibilidades de empleo si no pasa por estos programas de garantía social que si accede a los mismos. Se tratan de unos planes formativos especiales para quien no ha obtenido ningún éxito escolar durante la permanencia de más de 10 años con otros más en la educación secundaria obligatoria. Todo ello lleva a la estigmatización puesto que las reacciones generales de la población son negativas y además la ciudadanía está muy mal informada.
Por eso cabe analizar a fondo lo que sucede delante de los constantes cambios de una sociedad, que se sumerge rápidamente en la globalización, y donde en los centros educativos existen profesionales de la orientación profesional que trabajan con aquellos colectivos que tienen dificultades de inserción o de adaptación a nuestro sistema educativo y socio-laboral mediante sus asesoramientos pedagógicos constantes y diarios.
Y así hemos de cuestionarnos cuáles son los recursos que permiten optimizar, precisamente, ese trabajo formativo diario con sus instrumentos y el soporte recibido y procedente de las administraciones. Por todo ello se detalla lo siguiente:
Como preámbulo se dice que la tarea es compleja por el hecho de que han de potenciarse cambios o impulsar valores que llevarán hacia unas transformaciones pedagógicas más reales.
Primeramente se requiere, básicamente y cada día más, de un trabajo educativo continuado en equipo entre los docentes en los centros donde cada miembro se siente valorado y el conjunto fortalecido mediante una formación permanente en los mismos centros con las nuevas metodologías didácticas y las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) que van surgiendo.
En segundo lugar hemos de centrarnos en las funciones de los psicopedagogos existentes en los centros docentes, conjuntamente con el asesor externo, el miembro de l'EAP en Cataluña que visita esa institución formal regularmente, por el hecho que todos ellos han de desplegar:
a) Asesorar e intervenir en aquellas necesidades que plantean los estudiantes y los colectivos. Esa intervención incluye un diagnóstico, unas actuaciones y una evaluación del proceso de intervención.
b) Es propio de su faena asumir la intervención en problemas conductuales, de aprendizaje o didácticos (relación profesor-alumno, gestión del aula...) siempre en actuación conjunta con ese equipo docente lo crea necesario.
c) Responsabilizarse dándoles respuesta ya sea derivando a educadores sociales y otros profesionales relacionados con el mundo de la educación, externos al centro, si conviene; también tratando o orientando a los profesores.
d) Por lo que respeta a la dedicación lectiva, habrá que ofrecer aquellos créditos de enseñanza-aprendizaje vinculados a la psicopedagogía (orientación, socialización, aprendizajes instrumentales y alternativos, manuales y concretos frente a los más abstractos y generales, incluidos en el Proyecto Educativo del Centro. Todo ello potenciado por el Departamento de Orientación con su comisión recurrente de atención a la diversidad del alumnado.
e) Está ya muy asumido que estos profesionales entren con naturalidad en las aulas cuando el diagnóstico o el tratamiento de casos lo requiera para poder observar y luego ofrecer soportes en las mismas aulas con intervenciones educativas paralelas con el docente que las haya requerido.
Delante de esta medida presentada, en la que se cree, y se viene practicando durante años, podemos conseguir un éxito escolar de los estudiantes que pertenecen a ciertos colectivos.
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