Grado en Criminología y Seguridad

El grado en Criminología y Seguridad incorpora a los estudios de Criminología las materias relativas a la seguridad privada y a la prevención e investigación de hechos delictivos, tan presentes en la sociedad actual.
Este grado ofrece una formación completa y global mediante una perspectiva teórica y una amplia experiencia práctica, tanto en las propias instalaciones del centro como en ámbitos externos. Facilita el pleno acceso al mercado laboral a través del ejercicio de profesiones relacionadas con la criminalística y la seguridad.
Incluye las titulaciones de curso superior en Dirección de Seguridad Privada y el título propio en Investigación Privada, homologadas por el Ministerio del Interior para la habilitación profesional del ejercicio de las profesiones de director de seguridad privada y de detective privado, respectivamente.
 

Primer curso:

• Antropología.
• Derechos fundamentales.
• Economía y sociedad.
• Fundamentos de derecho constitucional.
• Fundamentos de derecho penal.
• Historia y sociedad.
• Introducción a la criminología.
• Introducción al derecho.
• Sociología.

Segundo curso:

• Criminología 1.
• Criminología 2.
• Derecho civil 1.
• Derecho civil 2.
• Derecho penal avanzado.
• Derecho penal de menores.
• Derecho procesal penal.
• Estadística y análisis de datos.
• Formas específicas de criminalidad.
• Fundamentos de la psicología.
• Teoría de la investigación criminal.

Tercer curso:

• Comunidad política y dsi.
• Derecho administrativo.
• Medicina legal.
• Psicología jurídica.
• Seguridad especial.
• Sistemas penitenciarios.
• Técnicas de investigación 1.
• Técnicas de investigación,
• Victimología.

Cuarto curso:

• Ética y deontología.
• Fundamentos del cumplimiento de las penas.
• Gestión de seguridad.
• Inglés criminológico.
• Investigaciones especiales.
• Mediación.
• Prácticas externas.
• Sistemas y planes de seguridad y emergencia.
• Técnicas digitales aplicadas a la criminología.
• Trabajo de fin de grado.

• Tener interés por el sistema de justicia y el de la seguridad, por el fenómeno criminal y los factores de criminalización. Y tener un compromiso con la objetividad y el apego a la metodología científica.
• Los estudiantes deben tener interés por los sistemas organizativos de la sociedad, por la configuración y ordenación de las comunidades políticas y por los principios y las normas que rigen las relaciones personales y sociales. Deben mostrar una curiosidad por el conocimiento de los fundamentos históricos, filosóficos y dogmáticos de los ordenamientos jurídicos y una preocupación por la realización, a través de su más adecuada conformación y aplicación, de los ideales de justicia que los alientan.
• También deben tener facilidad para analizar y comprender los fenómenos sociales, diagnosticarlos y proponer soluciones, además de tener capacidad analítica, de síntesis y de relación con el grupo, capacidad de comprensión y de abstracción, facilidad de expresión, sociabilidad, amplia visión del mundo y perspectiva sobre su posible evolución. Es también de interés y necesidad el conocimiento de otro idioma (preferentemente el inglés), así como tener aptitud para comunicación.

• Disponer de un lenguaje jurídico depurado, es decir, tener un conocimiento sólido de la dogmática y exégesis del derecho.
• Disponer de una visión de conjunto del ordenamiento jurídico español, de sus fuentes materiales, formales y cognitivas, del entorno en el que se aplica y sobre el que está constituido.
• Desarrollar las capacidades y habilidades necesarias para aplicar el ordenamiento jurídico español y estar en condiciones de llegar a desempeñar las funciones públicas o privadas –de enjuiciamiento, asesoramiento, defensa, acusación, mediación o equivalentes– propias del graduado en Derecho.
• Ser capaz de evaluar, criticar, discutir, elaborar y exponer proposiciones de naturaleza jurídica desde la comprensión de los contextos –sociales, económicos, internacionales, etcétera– en los que se plantean.
• Llegar a ser un jurista ecuánime que asuma el ejercicio de su profesión con la responsabilidad y solicitud propias de quien es consciente del compromiso que implica una tarea –la de buscar y hacer efectiva en cada caso la justicia– trascendental para el bien común y particular.

• Becas y  ayudas a los estudios de grado.