La formación inicial de los futuros profesores, para considerarse comprometida con el logro de la excelencia, tiene que darse en dos planos. El plano de la formación pedagógica y didáctica y en el plano de base conceptual amplia y capacitación intelectual. Motivados por la necesidad de implementar estos dos niveles de manera globalizadora, fundamentamos nuestra experiencia en la combinación de estrategias y técnicas didácticas.
Presentamos una experiencia de portafolio combinado con talleres cooperativos y autoevaluación reflexiva y coevaluación entre los propios alumnos.Se aplicó en el grupo de la Mención de Educación Especial impartida en el último semestre de los Grados de Educación Infantil y Primaria de la Universidad Internacional de Catalunya.
Tal como señalan Blanc, González y Trafí, (2008), un portafolios, "además de incluir una recopilación de evidencias de una manera ordenada y estructurada, y de crear un diseño creativo que muestre el proceso de aprendizajey el progreso intelectual, profesional y personal, ha de incluir dos aspectos fundamentales: la autoevaluación y la metacognición".
Por ello en esta experiencia se apuesta por un nivel de elaboración que va más allá de la mera recopilación de evidencias. Se potencia y se insta a que el alumno desarrolle su capacidad de pensamiento crítico y de toma de decisiones. Además de ser un instrumento que favorezca la integración final de los contenidos desarrollados en la Mención, es también, el instrumento para guiar el proceso de autorreflexión personal. Implica por parte del alumno la evidenciación del desarrollo competencial, así como una reflexión metacognitiva (De Miguel, 2006;).
Por ello consideramos que, por extensión, se orienta hacia la tan necesaria excelencia en la formación inicial de los graduados en Magisterio. Intentamos fomentar en el alumnado la orientación a la calidad, que la reelaboración y revisión del portafolio de manera individual y compartida permite: reelaboración individual en función de preguntas autorreflexivas y reelaboración compartida en base a las experiencias de coevaluación programadas.
En la complementariedad de todo ello se fundamentaban el logro del nivel didáctico y el intelectual.
- En la elaboración de un portafolio más allá de la mera recopilación de evidencias se busca el compromiso con la práctica reflexiva.Se incentiva la toma de decisiones propias a partir de la iniciativa autónoma. La recopilación de las evidencias debe ser integrada de manera significativa, por lo que se pide que el alumno evidencie su razonamiento y sea capaz de explicarlo en una presentación, que es el colofón de la experiencia. Hay estudios que afirman que la autonomía en la indagación motiva a los estudiantes y consigue mejores resultados, (Finkel, 2008).
- Dar explicación de su propio aprendizaje, de su progreso y de la propia toma de decisiones, facilita que se generaran procesos de trabajo cooperativo. En este sentido es preciso destacar entendemos como trabajo cooperativo a la acción detrabajar conjuntamente y de manera compartida para conseguir un fin común con toda la potencialidad educativa que ello conlleva en sí mismo (Pozo J., Monereo 2009). Se considera que el aprendizaje cooperativo facilita el logro de las competencias así como la capacidad crítica de los y las estudiantes. (Escribano González, 1995), la mejora en la auto eficacia (Cannon y Scharmann, 1996), también el aumento del compromiso personal.
- Implementar técnicas de coevaluación entre los propios alumnos .La evaluación compartida es un elemento constitutivo de la evaluación formativa (De Miguel Díaz, 2006)) que tiene una doble función, puesto que nos permitetener constancia de las acciones realizadas por los alumnos en base a dos niveles de análisis. Un primer nivel considerado externo realizado tanto por el profesor/a como por el resto de los alumnos a partir del contraste entre las diferentes aportaciones de cada una, y un segundo nivel "interno" que permite al propio alumno autoevaluarse.Interesa dejar constancia que la autoevaluación no es una habilidad automática, no es un proceso que se lleve a cabo habitualmente, sino que es necesario enseñarlo y apoyarlo. Es importante el papel del docente en guiar este aprendizaje. Saber autoevaluarse está indisolublemente ligado a las competencias de pensamiento crítico y orientación a la calidad como base de la excelencia.
La excelencia no puede ser una mera imposición fruto de una determinada exigencia. La verdadera excelencia debe emerger de forma personal.La motivación por y para la excelencia es fundamental en el logro de la misma.Por ello también queremos destacar el papel del docente como agente de transformación hacia la excelencia (Marchesi, 2007), en esta dirección, Bain (2005) explica que los mejores resultados en docencia universitaria los consigue aquel profesorado que cree que los estudiantes pueden cambiar. Como señala Touron (2010) sobre la función docente, "Ahora, lo importante ya no es qué se enseña, sino cómo se enseña. La importancia reside en lo que se aprende, no en lo que se enseña. Lo que interesa no es enseñar, sino aprender, transferir el protagonismo de laactividad al alumno, que es quien debe hacer suya la información y transformarla en conocimiento significativo y funcional para él. Ya no se trata de transmitir contenidos, que, por otra parte, estarán desfasados en poco tiempo, sino de fomentar hábitos intelectuales. Aquí reside una de las claves y el mayor de los retos del sistema educativo…"
Los resultados obtenidos nos motivan a seguir investigando y aplicándolo. La novedad de este enfoque metodológico, nos indica un camino a seguir. Esperamos que este trabajo constituya una contribución sustancial sobre una experiencia que busca el logro dela excelencia en la formación de docentes.
Referencias:
- Bain, K. (2005). Lo que hacen los mejores profesores universitarios. Valencia: Universitat de València.
- Bolivar, A.(2007). Diseñar y evaluar por competencias en la Universidad. ElEEES como reto. Colección Formación e Innovación Educativa en la Universidad. Vigo: Vicerreitoría de Formación e Innovación Educativa Universidade de Vigo.
- Blanc, González y Trafí, (2008). L'aplicació, el desenvolupament i l'ús reflexiu de la carpeta d'aprenentatge. A Diversos autors: Carpetes d'aprenentatge a l'educació superior: una oportunitat de repensar la docència. EINES d'InnovacióDocent a l'Educació Superior.
- Cannon, J., y Scharmann, L. (1996). Influence of a cooperative early field experience on preservice elementary teachers' science self-efficacy.Science Education, 80(4), 419-436. doi:10.1002/(SICI)1098-237X(199607)80:4<419::AID-SCE3>3.3.CO;2-W
- De Miguel Díaz, M. (2006) (coord). Metodologías de enseñanza y aprendizaje para el desarrollo de competencias. Orientaciones para elprofesorado universitario ante el Espacio Europeo de Educación Superior. Madrid: Alianza Editorial.
- Escribano González, A. (1995). Aprendizaje cooperativo y autónomo en la enseñanza universitaria. Enseñanza &Teaching: Revista Interuniversitaria De Didáctica, 13, 89-104.
- Finkel, D. (2008). Dar clase con la boca cerrada. Valencia: Universitat de València.
- Pan, Pan, Lee u Chang, 2010 Pan, P. J. D., Pan, G. H. M., Lee, C. Y., y Chang, S. S. H. (2010). University students' perceptions of a holistic care course through cooperative learning: Implications for instructors and researchers. Asia Pacific Education Review, 11(2), 199-209. doi:10.1007/s12564-010-9078-0
- Pozo J., Monereo (2009) Introducción: la nueva cultura del aprendizaje universitario o por qué cambiar nuestras formas de enseñar y aprender. En J.I. POZO Y M.P. PÉREZ ECHEVERRÍA (coords), Psicología del aprendizaje universitario: la formación en competencias. Madrid: Morata, 9-28.
- Marchesi, A. (2007). Sobre el bienestar de los docentes. Madrid: Alianza Editorial.
- Llano, A. (1994). Discurso de apertura del curso académico 1994-1995, Pamplona, Universidad de Navarra.
- Tourón, J. (2010). Talent Search as an assessment process. Keynote presentation, European Council for High Ability,París, julio, 7-9.